El actor Robert de Niro y su esposa, Grace Hightower, están buscando un piso de alquiler en Nueva York que se ajuste a sus necesidades, ya que su residencia está siendo totalmente remodelada después de haberse quemado en un incendio. 

El matrimonio De Niro se halla enfrascado en la búsqueda de una casa con cinco dormitorios en la Gran Manzana, de una o dos plantas, y con "toneladas de espacio para armarios", en palabras de Hightower a unas amistades, según recoge el rotativo New York Post.

La vivienda del protagonista de "Taxi Driver", ubicada en la avenida Central Park Oeste, se quemó en junio a consecuencia de un incendio que se originó en una secadora de ropa y que se propagó por todos los apartamentos de la quinta planta del exclusivo edificio, cuando De Niro se hallaba fuera de la ciudad.

El apartamento, valorado en 25 millones de dólares (19 millones de euros), está siendo sometido a una renovación integral que podría prolongarse durante tres años, y sus propietarios no han encontrado todavía un lugar apropiado en el que alojarse mientras duren las obras.

Siempre según el diario, De Niro firmó un contrato para alquilar por 100.000 dólares (76.100 euros) mensuales un apartamento que perteneció al fundador de la compañía de software Comverse, el magnate Jacob "Kobi" Alexander, quien fue perseguido por la justicia estadounidense por diversos fraudes y que ahora se halla en Namibia.

Sin embargo, según fuentes de su entorno, el artista habría anulado el contrato por "un asunto de tergiversación" con el apartamento, que habría vuelto a salir al mercado hace unos días.

Hightower confesó a los invitados de una fiesta celebrada por la editora Daisy Prince que es "fácil encontrar apartamentos con cinco dormitorios para comprar, pero no para arrendar", y que probablemente ella y su célebre marido tendrán que cambiar de área y mudarse a la parte sur de la ciudad de los rascacielos