La enseña Yves Saint-Laurent y el diseñador de zapatos Christian Louboutin mantienen sus diferencias sobre la comercialización de zapatos rojos, pese a la sentencia judicial estadounidense que da la razón al segundo sobre el registro de los modelos con suela de ese color. 

Las dos marcas francesas hacen una lectura diferente del fallo emitido este miércoles, por el Tribunal de Apelación de Nueva York, que establece que se puede registrar como marca la suela roja de los zapatos.

Para Louboutin, ese veredicto valida sus argumentos, mientras que YSL considera que la sentencia les permite seguir vendiendo sus zapatos rojos.

Ambas enseñas mantienen una batalla judicial desde que YSL lanzó al mercado un modelo de zapato rojo con la suela del mismo color.

Louboutin, que se hizo famoso con sus zapatos de suela roja, presentó una demanda por imitación.

En primera instancia, la justicia estadounidense rechazó en agosto de 2011 la demanda, afirmando que no se puede registrar un color como marca en la industria de la moda.

El fabricante de zapatos recurrió la sentencia y la corte de apelación le dio la razón este miércoles, en una sentencia que considera la suela roja como una marca propia de Louboutin.

"Estamos particularmente felices de que los jueces hayan validado nuestros argumentos principales: en primer lugar, que un color puede ser protegido y servir de marca en la industria de la moda, y que nuestra emblemática suela roja es una marca válida", reaccionó el zapatero en un comunicado.

Una lectura diametralmente opuesta a la que hace YSL, que en otro comunicado consideraba este jueves que la sentencia les permite "comercializar zapatos monocromos rojos" y que las demandas de Louboutin "han sido rechazadas".

"El juez reconoce la notoriedad de la suela roja Louboutin en contraste con el resto del zapato, lo que no sucede en ningún caso en el zapato de YSL", señala la marca que lleva el nombre del célebre modisto.

Saint-Laurent, propiedad del gigante francés del lujo PPR, consideró que en todo momento ha defendido la validez de su zapato enteramente rojo, que queda protegido por la sentencia.

La batalla judicial puede continuar, porque Louboutin ha anunciado que tomará "todas las medidas necesarias para la defensa de la marca".