Sentencia

El Salud no tendrá que pagar el tratamiento de Ricardo, el 'niño del gorro rojo'

El niño zaragozano que nació con tres cuartas partes de la cabeza necrosada terminará las operaciones en Valencia y sus padres tendrán que afrontar gastos superiores a los 4.000 euros, a los que se suman los 26.000 euros que ya han gastado.

Ricardo y sus padres en el gimnasio
Ricardo
HERALDO.ES

Golpe anímico, económico y moral para la familia de Ricardo, el niño zaragozano que nació con tres cuartas partes de la cabeza necrosada, lo que le obliga a evitar golpes y protegerse continuamente del sol con un pañuelo. El Juzgado de lo Social número 1 de Zaragoza ha dictado sentencia sobre su caso y estima que el Salud no debe reembolsar los 26.000 euros que los padres del niño le reclamaban por el tratamiento que está recibiendo en Valencia.


El Servicio Aragonés de Salud se negó a tratar a Ricardo cuando tenía 5 años porque consideraban que era demasiado apresurado someterlo a esas operaciones. Sin embargo, los padres descubrieron que el afamado cirujano plástico valenciano, Pedro Cavadas, quien ha realizado, entre otros, un trasplante de cara, realizaba este tipo de tratamiento en su clínica de Valencia. “En el Salud nos dijeron que si el niño o los padres teníamos algún tipo de problema psicológico que le pusiéramos un peluquín”, lamentó Ricardo Báez, el padre del pequeño. Por ello, la familia decidió costear las operaciones de su bolsillo y gastar en torno a 26.000 euros que consiguieron por medio de créditos bancarios.


“Cavadas no solo nos dijo que el tratamiento era posible, sino que era conveniente hacerlo cuanto antes”, explicó Ricardo, quien tomó la decisión de comenzar la cirugía en Valencia. Sin embargo, un mes antes de la última operación a la que fue sometido el menor en agosto, el servicio de Atención al Paciente del Hospital Infantil autorizó la derivación del caso para que lo asumiera la Seguridad Social en Madrid. “Fue un palo muy duro porque significaba empezar desde cero, ya que nosotros pedíamos que se trasladara el expediente a Valencia”, señaló Báez. En ese momento, Cavadas tomó la decisión de finalizar el tratamiento sin cobrar sus honorarios.


La sentencia agrava la situación


En la sentencia, la magistrada del Juzgado de los Social número 1 de Zaragoza admite que el Salud realiza este tipo de tratamiento desde la década de los 90 y recoge la negativa de la doctora del Miguel Servet a realizar el traslado a pesar de que el informe de Cavadas del 2009 señalaba el beneficio de esta reconstrucción.


Sin embargo, el Juzgado estima que el caso de Ricardo no cumple con los requisitos de “asistencia sanitaria urgente, inmediata y de carácter vital”. En este apartado, el Tribunal Supremo estima que son cuatro los requisitos exigidos para el reintegro de gastos por asistencia sanitaria ajena al sistema público. “Dos positivos: que se trate de urgencia inmediata, y que sea de carácter vital. Y los otros dos, negativos: que no hubiera posibilidad de utilización de los servicios de la sanidad pública y que el caso no constituya una utilización abusiva de la excepción”.


La sentencia recoge que “siempre desde una perspectiva del máximo respeto a la decisión familiar, y con una completa comprensión desde el punto de vista humano de todos los esfuerzos llevados a cabo por los padres (…) el supuesto no cumple con los requisitos de reintegro de los gastos sanitarios”.


Los padres recibieron la sentencia la semana pasada con “mucho dolor porque teníamos esperanzas de que, puesto que ha tardado tanto en salir, pudiera ser positiva”, valoró Ricardo Báez. Por eso han presentado un recurso de suplicación, porque valoran que a pesar de la setencia la magistrada tiene en cuenta los informes psicológicos: “La jueza recoge que el tratamiento había que hacerlo cuanto antes porque así la integración escolar de nuestro hijo sería más positiva”, recordó el padre.


El tratamiento continúa


Ahora la familia viajará el próximo 9 de mayo a Valencia para continuar con el tratamiento. En esta operación a Ricardo se le volverá a colocar un expansor para permitirle la extensión del cuero cabelludo. “Tendremos que afrontar los gastos de anestesia, alojamiento y viajes en los próximos seis meses, ya que Cavadas se hace, afortunadamente, cargo del resto del tratamiento”, aclaró Ricardo. Por ello, los padres tendrán que afrontar un gasto de unos 4.000 euros, sumados a la deuda que acumulan por la anterior intervención. Además, la situación económica de la familia es extrema ya que el padre se encuentra en el paro y la prestación por desempleo le concluye en junio.


Por ello, los padres se han visto obligados a buscar acciones para poder pagar los gastos. “Hasta ahora hemos sido transparentes y no hemos pedido dinero, pero hemos llegado a un punto en el que no tenemos otro remedio”, expresó el padre. Para ello, el próximo 12 de mayo, celebrarán unas actividades en el gimnasio Muscle Center de Delicias, centro en el que el pequeño Ricardo practica artes marciales. “El entrenador nos ha apoyado mucho y organizará cursos de defensa personal y sesiones de spinning para recoger dinero”, anunció Ricardo.


De este modo, la familia entera –tienen más de 7.700 miembros en su grupo de Facebook-- está más unida que nunca. Porque a pesar de que “Ricardo es un número de expediente como lo somos todos”, explicó su padre, el niño sigue manteniendo la sonrisa por muchas dificultades que se le pongan por delante.