Estos son los síntomas que alertan de que sí se debe usar la mascarilla, también en el bus
La ministra de Sanidad, Carolina Darias, ya ha anunciado que a partir del 7 de febrero las mascarillas ya no serán obligatorias en el transporte público.
En marzo de 2020 el mundo entero se paralizó, como si de una película se tratase. La pandemia, entonces totalmente desconocida, cambió durante meses, por completo, los hábitos de vida de quienes jamás imaginaron que tendrían que confinarse semanas enteras en sus casas.
Cuando se pudo salir a la calle, el miedo a contagiarse de covid era la prioridad y, por aquel entonces para hacerse con guantes de latex o con mascarillas, a precios desorbitados, había que apuntarse en la lista de espera de las farmacias, únicos establecimientos que los vendían.
Con el año 2023 recién estrenado la noticia que muchos esperaban ha llegado. Carolina Darias, ministra de Sanidad anunció hace tan solo unos días que el uso de las mascarillas en el transporte público, de los pocos lugares donde hasta ahora continúa siendo obligatorio, dejará de serlo a partir del 7 de febrero.
Algo con lo que algunos expertos no coinciden. Es el caso de Luis Miguel García, presidente de la Sociedad Aragonesa de Medicina de Familia y Comunitaria. "La pandemia debería habernos enseñado lo positivo del uso de la mascarilla. La responsabilidad social de no contagiar cualquier enfermedad y prevenirla es fundamental, sea en el transporte público o en un establecimiento cerrado", comenta el doctor.
"Ante cualquier síntoma catarral deberíamos llevarla puesta, sobre todo en espacios compartidos con personas vulnerables o en lugares en los que se concentren muchas personas", añade García. Pero, ¿cuál es, concretamente, la sintomatología que debería hacer saltar las alarmas?
- Estornudos.
- Congestión nasal.
- Moqueo.
- Dolor de garganta.
- Tos.
- Goteo de mucosidad y lagrimeo.
- Fiebre no alta.
- Diarrea.
- Fatiga.
- Náuseas o vómitos.
Por su parte, la Plataforma de Organizaciones de Pacientes también ha hecho un llamamiento a la prudencia tras el anuncio de la eliminación de la obligatoriedad del uso del cubrebocas en los transportes públicos. "Las personas con necesidades crónicas de salud siguen siendo las más afectadas frente al coronavirus y el resto de virus respiratorios", confirman desde la entidad.
Por recomendación de los expertos, el uso de la mascarilla seguirá siendo obligatorio en los centros sanitarios, los servicios sanitarios, las farmacias y los centros sociosanitarios para los visitantes y los trabajadores.
