Diferencias entre los síntomas de la gripe del tomate, la viruela del mono y la covid
Las tres afecciones comparten algunos malestares para el enfermo, pero no todos.
La aparición de los primeros casos de covid-19 llegó hace casi tres años con una primera identificación del SARS-CoV-2 en Wuhan (China). Fue el inicio de una pandemia que no está resuelta a día de hoy, aunque el control de la enfermedad y la perspectiva de una vacuna indicada para las últimas subvariantes.
A principios de mayo de este año, una enfermedad conocida desde hace décadas en el África subsahariana y muy rara en el resto del planeta presentaba un primer brote en Europa: la viruela del mono. Poco después, ese mismo mes, se reportaba el primer brote de gripe del tomate en Kerala (India). Las tres afecciones presentan algunos síntomas idénticos, otros similares y también unos cuantos que solamente aparecen en una de ellas.
Síntomas de ómicron, la actual covid
En el caso de la covid-19, cada variante ha ido añadiendo y restando síntomas habituales en la población infectada, hasta la actualmente denominada covid-22, que responde a los que se han contagiado por las subvariantes BA.4, BA.5 y Centaurus de ómicron. En este caso, los síntomas habituales en un alto tanto por ciento de los enfermos son dolor de garganta y cabeza, así como la tos y la secreción nasal, la fatiga y el dolor muscular. La pérdida de gusto y olfato, muy común en los primeros meses de covid, son ahora más raros, al igual que la fiebre.
La gripe o fiebre del tomate
En el virus identificado en la India, que ha sido el último en tener exposición pública mundial, también aparecen la fatiga y el dolor corporal; en cuanto a las erupciones en la piel, son mucho más acusadas que entre los enfermos de la actual covid, y también hay dolor intenso en las articulaciones. También aparecen náuseas, vómitos, diarrea o deshidratación. No se descarta que pueda tratarse de una secuela de la llamada enfermedad de manos, pies y boca, la chikungunya o del dengue, y afecta sobre todo a los niños y a los adultos con inmunosupresión. La gripe (también se le llama fiebre) del tomate es muy contagiosa, tal y como advierte la revista médica ‘The Lancet’. El nombre de ‘tomate’ se debe a la presencia de ampollas rojas y bastante dolorosas por todo el cuerpo, que crecen hasta un tamaño similar al de un tomate; además, se confunden en algunos casos con las que salen por la viruela del mono.
La viruela del mono
Esta enfermedad presenta síntomas muy aparatosos. Al principio aparece un cuadro de fiebre, dolor de cabeza, inflamación de los ganglios linfáticos, dolor lumbar, dolores musculares y fatiga. Enseguida salen lesiones muy aparatosas en la piel, especialmente en la zona anogenital, que tardan hasta tres semanas en aparecer.
