alergias

Alergias al polen: "Las gramíneas salvajes se verán favorecidas por la nieve de enero"

El doctor Carlos Colás, jefe de Alergología del hospital Clínico de Zaragoza, explica cómo va a ser esta temporada para los alérgicos al polen, que comienzan ya a mostrar los primeros síntomas por la abundante polinización del ciprés.

Si se es alérgico al polen, conviene conocer cuál es el alérgeno responsable de esa alergia y la época de mayor afección.
Si se es alérgico al polen, conviene conocer cuál es el alérgeno responsable de esa alergia y la época de mayor afección.
Pixabay

El paso del temporal Filomena y las nevadas auguran, por el momento, una temporada complicada para los alérgicos al polen de las gramíneas, cuya polinización se verá favorecida por estas precipitaciones tan intensas que trajo el mes de enero, en su mayoría en forma de nieve. Así lo indica el doctor Carlos Colás, jefe de Alergología del Hospital Clínico de Zaragoza, al explicar cómo van a ser los próximos meses para estos pacientes, que en muchos casos, comienzan ya a mostrar los primeros síntomas de la enfermedad por la alta incidencia del polen del ciprés en los entornos urbanos. 

"Ahora el polen que está desarrollándose es el de las cupresáceas, que es una planta muy abundante en las ciudades, especialmente en Zaragoza, donde todas las zonas ajardinadas que tienen seto están hechas de este, y está empezando ya a dar síntomas propiciado por el buen tiempo", comenta este especialista. 

La ventaja del ciprés: "Aunque la polinización es intensa, la temporada es más bien corta y se reduce a unas cuatro o cinco semanas si las condiciones son las habituales"

En Aragón, se estima que una de cada cinco o seis personas que son alérgicas al polen, lo son también al del ciprés. Este alergólogo subraya que el impacto que tiene en la población es "extraordinariamente alto" y cada vez tiene "mayor importancia" en el desarrollo de síntomas al tratarse de una planta "muy abundante" que "produce grandes cantidades de polen y expone a las grandes áreas metropolitanas", que a su vez concentran a más gente. La ventaja es que, a pesar de su intensidad, la temporada es más bien corta y se reduce a unas cuatro o cinco semanas en circunstancias normales. 

Las mascarillas y el confinamiento como aliados

Además, otros factores como el uso de mascarillas o el confinamiento motivado por las nuevas restricciones de movilidad juegan una influencia positiva y se han convertido en verdaderos "aliados" para los pacientes alérgicos, ya que "evitan de forma drástica la exposición" intensa al alérgeno. "Estamos en una situación en la que nunca habíamos estado. El grado de exposición al polen está totalmente modificado por el uso de mascarillas y las restricciones de movilidad. Tradicionalmente en estos días y fines de semana de buen tiempo la gente se desplazaba al campo, al aire libre o a zonas alejadas de la ciudad donde la exposición podía ser mas intensa, pero con las restricciones y el uso de mascarillas todas esas circunstancias se han modificado de forma importante", advierte este especialista al hablar del efecto "positivo" que estas medidas están teniendo para sus pacientes.

"Las restricciones de movilidad y de uso de mascarillas tendrán una influencia positiva en pacientes alérgicos al limitar la exposición"

Aunque todavía es pronto para pronosticar con exactitud cómo serán los meses de mayo y junio, cuando empieza la temporada de las gramíneas, este alergólogo adelanta que se dan una serie de circunstancias que podrían favorecer una polinización más intensa. Por un lado está el paso de Filomena y las nieves, que al igual que tienen un efecto positivo en el cereal, influyen sobre estas plantas de la misma familia botánica. "Las gramíneas salvajes se verán favorecidas por estas precipitaciones que hubo en enero tan intensas y a última hora van a influir otros factores, como la temperatura y las precipitaciones que haya los meses anteriores a la polinización. En función de eso cambiará la situación, pero los datos que tenemos hasta ahora son favorables a que la polinización sea más intensa", advierte este especialista, que insta a mantener todas las medidas de protección recomendadas hasta la fecha. 

Colás insiste también en que a lo largo de la temporada pasada vieron cómo estas medidas tuvieron un impacto positivo en la mayoría de los pacientes. "Todos están de acuerdo en que es uno de los años que mejor han estado, porque verdaderamente se han expuesto menos de lo normal debido a la barrera física de las mascarillas, pero no porque haya menos polen", puntualiza.

A la hora de correr o hacer deporte al aire libre, este doctor recomienda a los pacientes alérgicos seguir usando las mascarillas recomendadas para la prevención del contagio, es decir, la quirúrgica convencional o la FFP2 en los casos que esté indicado, ya que ambas ofrecen "protección suficiente" no solo frente al virus sino para la propia exposición al polen. "En circunstancias normales -añade-, cuando no estemos bajo efecto de la pandemia, se podrán usar otras mascarillas mas cómodas de llevar, las de filtro unidireccional, que permiten que solo hagamos resistencia al inspirar. Pero no se pueden usar en periodo de covid porque no filtra el aire cuando nosotros lo expulsamos, por lo tanto no previene los contagios del virus", advierte este especialista.

Pacientes alérgicos y complicaciones derivadas de la covid

En el caso de los pacientes alérgicos, Colás afirma que se ha confirmado una sospecha importante que ya tenían el año pasado, durante la primera ola de la covid-19, y que exime a estas personas de adoptar precauciones "especiales" o diferentes del resto de la población. "Los pacientes con rinitis alérgicas o con asma no tienen mayor probabilidad de desarrollar complicaciones como consecuencia del virus. Por tanto, no deben tener temor a que puedan sufrir más complicaciones. Las pueden sufrir, tienen las mismas posibilidades de contagiarse que otra persona, pero no tienen un riesgo aumentado por ser alérgicos", reitera este especialista, quien apunta a otra teoría. 

Desde el punto de vista clínico, todo parece indicar que los pacientes que están en tratamiento para el asma podrían verse favorecidos por el uso de inhaladores para prevenir algunas de las reacciones inflamatorias que tienen lugar en los pulmones como consecuencia del virus. "Esto último -matiza- es de momento una teoría, pero lo que sí podemos decir con seguridad es que nuestros pacientes no desarrollan más complicaciones que el resto de individuos", apostilla. 

Para mitigar los síntomas de las alergias, Colás recomienda también a los pacientes con rinitis alérgicas o asma que no abandonen el tratamiento porque lejos de favorecerles les puede perjudicar. "Como la mayor parte de nuestros pacientes tienen la historia electrónica activada y el tratamiento programado, basta con llamar al centro de salud y al médico de Atención Primaria para que les activen la medicación y ponerlo en marcha", concluye Colás. 

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión