Recetas saludables

Cuatro recetas dulces y proteicas... ¡perfectas para después de entrenar!

Estas preparaciones sirven para quitar la gula de dulce pero también para mantener una nutrición sana.

Tortitas de avena con frutos rojos.
Tortitas de avena con frutos rojos.

Para los que piensan que comer sano significa renunciar al dulce, hay innumerables recetas que mantienen un toque azucarado pero sin necesidad de recurrir a azúcares refinados o procesados. Aprovechando, por ejemplo, el dulzor de las frutas las recetas pueden resultar de lo más deliciosas.

Estas cuatro recetas son, además de sanas y fáciles de preparar, proteicas. Estas preparaciones son, por tanto, idóneas para disfrutar de un desayuno completo (no vale solo con comerse una magdalena acompañada de un café) o para recuperar energías después de una sesión de entrenamiento.

Tortillla con avena y plátano

Esta receta se prepara de un modo tan sencillo como es machacar un plátano maduro, mezclarlo con un huevo (o con clara de huevo si se quieren evitar las grasas) y avena (en copos o en harina). Además es rica en fibra.

Mousse de fresas y queso fresco

De sabor refrescante y delicado. Primero se preparan y cortan las fresas para después pasarlas por la batidora. Se añade el queso fresco (que puede ser también queso batido o incluso yogur griego), se mezcla hasta conseguir una textura homogénea. Se puede decorar con frutas del bosque, pero para gustos, colores.

Smoothie de frutas, queso y avena

Solo es necesario, para preparar esta receta, elegir las frutas que más nos gusten. Se puede aprovechar la temporada o apostar por una combinación que no falle, como las fresas y plátano. Se bate todo, se mezcla con queso fresco y, a modo de topping se añaden unas cucharadas de copos de avena. Perfecta para el calor, esta receta es además proteica y rica en fibra.

Pudín vegano

Para esta receta hará falta tofu sedoso, cacao en polvo, chocolate negro y vainilla al gusto. Se pasa el tofu, bien escurrido, por la trituradora de alimentos y se añade el cacao. Después de derretir el chocolate, este también se agrega y se mezcla hasta obtener la textura deseada.

Las preparaciones son rápidas y, por el tipo de plato, se recomienda hacerlas en el momento. Ahora ya solo queda coger una cuchara... ¡y a disfrutar! ¿Quién dijo que comer bien era complicado?

¿Quieres recibir todas nuestras propuestas de planes para mantenerte en forma? Apúntate y te enviaremos nuestra newsletter.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión