Día Internacional de la Prueba del VIH
Combatir el estigma y la discriminación, claves para acabar con el VIH
En España viven entre 140.000 y 170.000 personas con infección por el VIH, de las que casi una de cada cinco (18%) no está diagnosticada.
Los colectivos LGBI advierten de que "solo con pastillas" no se acabará con el VIH y reclaman cambios legales que eviten el estigma, la discriminación y la serofobia que aun retraen a muchas personas de hacerse las pruebas en España, donde anualmente se registran unas 4.000 nuevas infecciones.
Es la demanda de estos colectivos coincidiendo con la celebración este 20 de octubre del Día Internacional de la Prueba del VIH, que han aprovechado para denunciar que, un año después de su aprobación, el Pacto Social por la No Discriminación y la Igualdad de Trato Asociada al VIH "sigue sin implementarse".
"No hay pastillas contra la discriminación. La evidencia científica y los cambios biomédicos tienen que ir de la mano de cambios legislativos y sociales y de lucha contra la discriminación", asegura Quim Roqueta, de la asociación Gaispositius, quien también aboga por denunciar a las empresas, personas e instituciones" serofóbicas.
Roqueta valora que el Gobierno eliminara hace un año el VIH como motivo de exclusión para acceder a cualquier empleo público, entre ellos las Fuerzas Armadas y los cuerpos y fuerzas de Seguridad del Estado, pero cree que aun hay mucho que hacer "para borrar el imaginario "sida = vergüenza y sida = discriminación".
Y es que continúa el "miedo al rechazo o a tener algún problema laboral", asegura desde la Federación Estatal de Lesbianas, Gais, Transexuales y Bisexuales (FELGTB) su coordinador de Salud Integral, Rubén Mora, quien asegura que son sentimientos que inciden en que "una persona decida no conocer su estado serólogico, porque no se sienta preparado para afrontarlo".
Según los últimos datos del Ministerio de Sanidad, en España viven entre 140.000 y 170.000 personas con infección por el VIH, de las que casi una de cada cinco (18%) no está diagnosticada y en un 37,8% de los casos se han realizado diagnósticos tardíos, cuando llevaban una media de tres años con la patología sin saberlo.
Por ello, Ramón Espacio, portavoz de Cesida, aboga por fomentar el diagnóstico temprano para cortar la cadena de transmisión y pide que se fomente el uso de la "prueba para el autodiagnóstico" que está disponible en las farmacias españolas desde enero de 2018 sin prescripción médica. A juicio de Espacio "es fácil y útil" para personas que se hacen la prueba de manera repetida o para los que están en entornos rurales y "por el estigma y el miedo no quieren contar a su médico de cabecera su vida sexual".
Aunque detalla que los colectivos mas afectados y vulnerables al VIH son los hombres gais y bisexuales, Espacio subraya que también "mujeres, heterosexuales y migrantes (por falta de acceso al sistema público) son colectivos que no se hacen la prueba porque no se consideran en riesgo".
Por ello, insiste en la necesidad de hacer más esfuerzos en campañas de educación con la implantación de la formación afectivo sexual en los currículos, así como se incida más en las enfermedades de transmisión sexual en general, que "están aumentando".
"Es inevitable que la gente pierda un poco el miedo al VIH porque no mata, pero sigue siendo una enfermedad grave", asegura Espacio, mientras Rubén Mora demanda a los partidos políticos que prioricen la atención a las personas con VIH para que sus derechos estén en el centro de políticas sanitarias y estrategias que fomenten la realización de la prueba. Y creen también imprescindible la eliminación del término "enfermedad infecto contagiosa por el de infecto transmisible" para "terminar con el imaginario del principio de la epidemia en los 80". Cesida insiste en que una persona en tratamiento que tiene relaciones sexuales con preservativo "no transmite el VIH porque su carga viral es indetectable".
Además, la Felgtb ha pedido que se adopten medidas legales contra los que impiden contratar seguros a las personas con VIH, a pesar de que la ley para la Defensa de los Consumidores lo prohíbe. Y reclama la creación de programas de formación y sensibilización en materia de VIH dentro del Poder Judicial, para que todos los implicados en la aplicación de la jurisprudencia conozcan la información médica actualizada.
