Concepción Ferrer: "Contra las pseudociencias es necesario ponerse serios"

La presidenta del Colegio de Médicos de Zaragoza asegura que estas prácticas "nos hacen retroceder varios siglos". Los galenos ven bien el plan del Gobierno de sacarlas de las universidades

Productos de homeopatía en una farmacia de Zaragoza.
Productos de homeopatía en una farmacia de Zaragoza.
Aránzazu Navarro

“Contra estas pseudociencias es necesario ponerse serios”. Así de tajante se muestra Concepción Ferrer, presidenta del Colegio Oficial de Médicos de Zaragoza (COMZ), al valorar el plan del Gobierno de expulsar estas terapias alternativas de los centros sanitarios y universidades, presentado hoy por los ministros de Sanidad, María Luisa Carcedo, y Ciencia y Universidades, Pedro Duque. A su juicio, una legislación clara al respecto evitaría muchos disgustos y engaños a los ciudadanos, que se ven arrastrados hacia estas prácticas terapéuticas “que nos hacen retroceder varios siglos”. Recuerda además Ferrer que la Universidad de Zaragoza retiró ya hace años todos los grados y titulaciones referidas a estas prácticas.

También el presidente de la Organización Médica Colegial (OMC), Serafín Romero, considera que el plan del Gobierno “es una oportunidad” y por eso la comunidad médica lo ve “con buenos ojos”. “La población está muy desinformada, pero estas pseudociencias se disfrazan de adjetivos amables y hacen que los pacientes pierdan oportunidades de tratamientos verificados", señala por su parte el tesorero de la organización, Jerónimo Fernández Torrente.

Ferrer añade al respecto que siempre hay que dejarse guiar “por la evidencia científica”, y destaca que el fomento de la vida natural que viene haciéndose desde hace ya varios años también ha dado lugar a un bombardeo publicitario de productos que no siempre son adecuados para la salud y el tratamiento de las enfermedades. Y se muestra tajante: “Hay que evitar toda clase de publicidad sanitaria”, asevera la presidenta del COMZ, quien pone como ejemplo Francia, donde no se permite este tipo de anuncios.

Sin embargo, muchos de estos productos siguen teniendo mucho predicamento entre los consumidores. Por ejemplo, más de 22.600 aragoneses aseguran que consumieron productos homeopáticos en los últimos 15 días, según una encuesta del Instituto Nacional de Estadística (INE), que se llevó a cabo en 2017. Este estudio demuestra que la comunidad aragonesa sigue liderando la compra de este tipo de productos, aunque su adquisición ha descendido de manera importante en los últimos años. En concreto, según estas estadísticas mientras que en 2011 eran más de 37.000 los aragoneses que afirmaban comprar habitualmente homeopatía; en 2017 esta cifra había descendido hasta los 22.600, una reducción de alrededor de un 40%.

La explicación, a juicio de Concepción Ferrer, está en el volumen de negocio que estos productos representa para los laboratorios farmacéuticos. Para muestra, da un botón. Los arándanos resulta eficaces para la prevención y tratamiento de las infecciones del tracto urinario. Es debido a la existencia en estos frutos de proantocianidinas, un grupo de polisacáridos que minimizan e inhiben la actividad de la bacteria Escherichia Coli (E.coli), responsable de la mayor parte de las infecciones urinarias de repetición, como la cistitis. Pero, incide la médico, se trata de un coadyuvante, no de un tratamiento en sí mismo de la enfermedad. Para eso, las farmacias dispensan Monurol, un antibiótico de amplio espectro que cuesta unos dos euros. "Pero una caja de comprimidos de concentrado de arándanos puede llegar a costar 40", denuncia Ferrer.

Cambiar la legislación

En la presentación del plan gubernamental, la ministra de Sanidad anunció que “los establecimientos públicos o privados que incluyan pseudoterapias no podrán llamarse centros sanitarios”. El Gobierno de Aragón recuerda que una de sus propuestas gira en ese sentido, ya que en la actualidad si alguien quiere abrir un centro de terapias naturales en la Comunidad, para solicitar la autorización se acoge al real decreto nacional, que tiene un apartado específico para este tipo de establecimientos, en concreto el referido a los 'centros sanitarios de terapias alternativas'. Por ello, la DGA reclama una normativa clara al respecto ya que buena parte de estas terapias están avaladas legalmente, e incluso la homeopatía está regulada por la Unión Europea.

Los médicos piden que el plan del Gobierno sea “transparente y efectivo” y que aborde las pseudoterapias desde una perspectiva global, un asunto del que trataran el lunes la ministra y los consejos generales de las profesiones sanitarias y en el que está comprometido la OMC con la creación de un Observatorio contra las pseudociencias, pseudoterapias, intrusismo y sectas sanitarias que permite, según la organización, compartir y transmitir información contrastada, verificada y validada sobre este tipo de productos.

Según el artículo 26.2 del Código de Deontología Médica, “no son éticas las prácticas inspiradas en el charlatamismo, las carentes de base científica y que prometen a los enfermos la curación, los procedimientos ilusorios o insuficientemente probados que se proponen como eficaces, la simulación de tratamientos médicos o intervenciones quirúrgicas y el uso de productos de composición no conocida”.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión