Los antibióticos son medicamentos muy valiosos para combatir las infecciones bacterianas, pero su efecto puede verse disminuido si se toman de forma incorrecta. "El uso inadecuado de los antibióticos provoca la aparición de cepas bacterianas resistentes a estos medicamentos, lo que puede hacerlos inservibles en algunos casos", advierten en un comunicado fuentes del Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza.

Según datos del Barómetro Sanitario 2015 presentado la semana pasada por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad y el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS), uno de cada cinco españoles, un 18,8%, asegura tomar antibióticos por su cuenta sin que se los prescriba su médico. El presidente del COFZ, Ramón Jordán, asegura que ajustar los envases de los antibióticos al tratamiento impide la acumulación de medicamentos en los botiquines caseros y evita la automedicación: "Si se utilizan solo los comprimidos necesarios para tratar una infección puntual se evita que el paciente se automedique y recurra a los fármacos sobrantes cuando piense que tiene un problema similar, por ejemplo, un catarro causado por un problema vírico que nunca necesitaría un antibiótico".

El presidente del COFZ también ha destacado el incumplimiento de los tratamientos como una de las causas para acumular medicamentos en las casas: "Es fundamental no abandonar el tratamiento indicado, a pesar de que se perciba una mejoría en los síntomas". Para evitar la automedicación, Jordán recomienda llevar los antibióticos sobrantes a los contenedores SIGRE situados en las farmacias.

Tomar antibióticos cuando no se necesitan provoca que las bacterias se hagan resistentes a ellos, es decir, que cuando se adquiera una infección por una bacteria, el antibiótico ya no tendrá efecto sobre ella y no se curará la infección. Las bacterias pueden transmitirse de unas personas a otras y como consecuencia, el uso irresponsable de antibióticos puede aumentar el número y la gravedad de las infecciones, que pueden ser muy difíciles de tratar.

Consejos básicos para la población

La atención farmacéutica para asegurarse el cumplimiento de los tratamientos antibióticos es la base para reducir la mala utilización de estos fármacos y de la consecuente aparición de resistencias.

Desde el Colegio Oficial de Farmacéuticos de Zaragoza han desarrollado múltiples campañas de educación sanitaria dirigidas a la población, con consejos básicos e información de utilidad acerca de un uso adecuado de los antibióticos. Estos son cinco consejos básicos: No solicitar antibióticos sin receta médica. No recomendar antibióticos a otras personas. Al finalizar el tratamiento, evita guardar los antibióticos que te sobren en el botiquín de casa. Se recomienda llevarlos a los contenedores SIGRE situados en las farmacias. Cuando un médico, odontólogo o podólogo prescribe un tratamiento con antibióticos, es imprescindible seguir sus instrucciones en cuanto a la duración recomendada y la dosis que debe de tomar. Ante cualquier duda sobre cómo tomar el medicamento, durante cuánto tiempo, para qué sirve y cuándo debe tomarse pregunta a tu médico o farmacéutico.Ir al suplemento de salud.