El sindicato que representa a los 10.000 enfermeros de Aragón (Satse Aragón) y el Colegio Profesional de estos especialistas denunciaron ayer que el real decreto aprobado por el Ministerio de Sanidad, y que regula su labor en el uso y prescripción de fármacos, es “un varapalo a traición que se gestó con 24 horas de antelación”.

La norma, que aún no ha entrado en vigor, estuvo precedida de años de debate (desde 2009) pero en el último momento se cambió el contenido de un artículo fundamental. En virtud del mismo, los profesionales no podrán utilizar algunos productos básicos o vacunar como hasta ahora si esto no está supervisado por un médico, algo que “retrasarᔠy “dificultarᔠla atención, y les obligará a vivir en una situación de “huelga competencial” para cumplir la ley. “Creará un grave problema asistencial en Aragón”, denunciaron desde Satse.

A nivel nacional, los representantes de la Enfermería preparan acciones judiciales para la suspensión cautelar del real decreto.