Consejos para no marearse en el coche estas vacaciones

Viajar en los asientos traseros es poco recomendable al sentirse más la inercia de las aceleraciones y frenadas.

Si no se emplea el vehículo es posible llevarlo al concesionario, dejarlo en el desguace o, incluso, venderlo.
Quien viaje en furgoneta o caravana puede que tenga que ir en un asiento de espaldas al conductor (mejor no echarlo a suertes, si uno se marea).

No viajar en los asientos traseros, no leer o ventilar el vehículo son algunos de los consejos que ofrece un informe elaborado AutoScout24 para no marearse en los viajes en coche estas vacaciones.


Del estudio se desprende que mirar por la ventanilla y fijar un punto en el horizonte es lo más recomendable para evitar marearse a la hora de viajar en coche. En este sentido, el informe indica que leer un libro puede provocar mareo, ya que la información que recibe el cerebro de los distintos sentidos no concuerda.


Para combatir el aburrimiento, lo ideal es distraerse con música, una conversación o una película. Siempre y cuando haya que mirar de frente, el ocio es de lo más recomendable.


Otra causa frecuente de mareos en los viajes por carretera es ir sentado en sentido contrario a la marcha. Quien viaje en furgoneta o caravana puede que tenga que ir en un asiento de espaldas al conductor. Si una persona ya ha tenido malas experiencias pasadas es mejor no tentar a la suerte y, antes de emprender el camino, es recomendable pedir cambiar su asiento por uno en sentido de la marcha.


Si una persona es propensa a marearse, mejor no echar a suertes quien viaja delante. Por mucho que a todos les guste viajar en el asiento de copiloto, es más probable que aparezcan síntomas de mareo si se viaja en la parte de atrás. Esto es debido a que en los asientos traseros se notan más los movimientos del coche y las inercias de las aceleraciones y frenadas.


Por otro lado, el informe señala que una conducción agresiva no ayuda precisamente a que los acompañantes en el vehículo pasen el viaje sin sufrir mareos. El conductor puede ser el mejor remedio contra estos inconvenientes, siempre y cuando conduzca de una manera sosegada y tranquila, con aceleraciones y frenadas suaves y progresivas.


Algo tan simple como ventilar el interior del vehículo puede evitar una parada extra para aliviar un mareo. En ocasiones, un coche cerrado puede provocar que el ambiente se cargue, incluso con el aire acondicionado puesto, y de ahí al mareo hay un paso.


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