Cuando a Maribel Bueno Muñoz, de 52 años, le diagnosticaron cáncer de mama, su lucha contra la enfermedad se convirtió en la lucha de toda una familia unida.

"Mi marido y mis hijos lo pasaron conmigo y hoy corremos todos juntos", afirma con una sonrisa.

Para esta paciente que hoy colabora con la Asociación Española contra el Cáncer, "cuidar la parte emocional" es fundamental para afrontar la enfermedad y conseguir ganarle el pulso. Por eso, al recibir el diagnóstico hace ya tres años, Maribel acudió a la AECC en busca de ayuda psicológica. Es allí, además de en casa y con los suyos, donde encontró "todo el apoyo del mundo".

"Desde el primer día me he sentido muy arropada y estoy más que agradecida con los profesionales del Salud y con la gente de la asociación. Me sentí querida por todo el mundo y eso me hizo tirar para adelante", confiesa.

En la actualidad, Maribel continúa yendo a terapia "de vez en cuando" para encontrarse con Ana Isabel, la psicóloga que la ayudó en su día y que todavía hoy la sigue apoyando. El resto de pacientes, aragonesas y amigas que hizo durante los meses de terapia, son sus "compañeras de batalla", un grupo "muy majo" unido por un mismo problema para intentar salir adelante "juntas".  

Este año, con motivo de la II Carrera contra el Cáncer que se celebrará el próximo mes de junio en la capital aragonesa, esta zaragozana volverá a participar en la marcha rodeada, como siempre, de los suyos.

"Me emociona correr contra el cáncer por todo el ambiente de solidaridad, amistad e ilusión que genera. Fuimos ya el año pasado con mi marido y mis hijos y este año repetiremos con mayor motivo", dice entusiasmada. 

En la actualidad, esta zaragozana continúa en tratamiento hormonal a causa de la enfermedad. Toma una pastilla al día y acude cada seis meses a una revisión, tras recibir en su día quimioterapia y someterse a una intervención quirúrgica. "Cuando llega la hora de volver a consulta pasas muchos nervios, pero sabes que es por una misma y que es muy importante que continúen haciéndose estas revisiones de forma preventiva", indica.

Su marido y sus hijos -de 22 y 27 años- siguen tan pendiente de ella como el primer día y, por eso, el próximo 21 de junio volverán a hacer el recorrido juntos. "Pasas una mañana muy bonita porque aparte de hacer ejercicio, colaboras con la asociación, y eso es algo que a todos los que nos toca de cerca nos gusta", cuenta ilusionada antes de insistir en que "mientras pueda", repetirá de año en año con toda la familia.

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