Para acceder a los tratamientos de reproducción asistida (TRA) en un hospital público, es necesaria tener una buena dosis de paciencia. O de suerte, si se da con el centro que tiene una lista de espera menos voluminosa. Porque las diferencias en la espera en los hospitales públicos puede multiplicarse por diez, según la Asociación pro Derechos Civiles, Económicos y Sociales (Adeces), que reclama una mayor inversión pública para dar respuesta "a los retos sociales que la infertilidad plantea". Las mujeres que van a recibir una fecundación in vitro deben espera una media de 406 días -una semana más que en 2011 cuando se realizó el anterior estudio-, mientras que el tiempo medio para una ovodonación es de 465 días -83 menos que en el anterior informe-. Unos tratamientos a los que acudieron en 2011 más de 800.000 parejas españolas y que crece a un ritmo de unos 16.000 casos al año.

Pero el problema reside en las enormes diferencias entre los extremos. Mientras en el hospital universitario de La Paz (Madrid) hay que esperar 665 días -casi dos años-, en el Príncipe de Asturias de Alcalá de Henares, la tardanza llega a los dos meses. En los 545 días se encuentran el Reina Sofía (Córdoba), Virgen de la Arrixaca (Murcia), Virgen de la Salud (Toledo) o La Fe (Valencia). En cuanto a la ovodonación, el tiempo máximo de espera para el tratamiento se estanca en los dos años. Por otra parte, la inseminación artificial de cónyuge o de donante (IAC / IAD), los tiempos medios de 2015 se sitúan en los 47 y 27 días. Supone un descenso de 78 días, aunque los tiempos máximos rozan el año y los seis meses, respectivamente.

En el estudio 'España 2015 Técnicas de Reproducción Asistida (TRA): la necesidad de inversión pública para tratar una enfermedad y un problema social', Adeces denuncia las barreras que dificultan desde 2011 el acceso de las mujeres a los tratamientos: reducción de la edad, del número de intentos permitidos, exclusión por opción sexual de las mujeres o el modelo familiar.

Adeces denuncia, en este sentido, que más preocupantes son las excusas arbitrarias y discriminatorias para impedir el acceso a las TRA a las mujeres que quieren ejercer la maternidad en solitario o son una pareja lesbiana.

Impedimentos detectados en Castilla-La Mancha, Cataluña, Comunidad Valenciana, Madrid, Murcia y Navarra que atentan contra el ordenamiento jurídico. El 41% de los hospitales públicos que han colaborado en el estudio (39), incurren en esta discriminación. Todas las autonomías disponen de centros públicos en los que se realiza la inseminación artificial y la fecundación in vitro. En cambio, según las respuestas recibidas por Adeces, la ovodonación se practica en seis regiones: Comunidad Valenciana, Madrid, Galicia, País Vasco, Canarias y Andalucía. Sin embargo, las clínicas privadas están presentes en todas las comunidades y ofrecen todas las técnicas de reproducción asistida.

Coste

A estas barreras se añaden las derivadas de las listas de espera y los costes de los tratamientos de aquellas mujeres que optan por acudir a una clínica privada. El aplazamiento de la maternidad, el tipo de tratamiento y los nuevos límites establecidos por la sanidad pública, como rebajar la edad a menos de 38 años para acceder a una IAC, son otros de los motivos esgrimidos por los encuestados.

Precisamente este tratamiento de reproducción asistida tiene un coste medio por ciclo (intento) de 757 euros, con una horquilla oscila entre los 450 y los 1.000 euros; por el contrario, el IAD aumenta su coste a 1.229 euros. Mientras, la fecundación in vitro registra un coste medio de 4.542 euros, con un precio máximo de 7.000 euros y un mínimo de 2.600 euros. Por último, 6.508 euros es el precio medio de la ovodonación. Por edades, el estudio refleja que la edad media de las mujeres en los centros públicos para la fecundación in vitro es de 39,3 años.

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