Condenan a indemnizar a un extrabajador del amianto por la muerte de su mujer

Ella falleció a raíz del contacto con las fibras de este material que quedaban en la ropa de su marido.

El juzgado social número 14 de Barcelona ha condenado a la empresa Uralita a indemnizar con 86.276 euros a un extrabajador expuesto al amianto cuya mujer acabó muriendo por estar en contacto también con las fibras de este material, dado que ella se encargaba de lavar la ropa de trabajo de su marido.


La sentencia es pionera en Cataluña, según el Colectivo Ronda, que ha representado a este extrabajador que en 2012 decidió demandar a Uralita después de que su mujer contrajera una enfermedad relacionada con el contacto con las fibras de amianto y muriera en 2011.


Este hombre, cuyas siglas no se facilitan por voluntad del afectado, trabajó entre 1963 y 1992 para la empresa Rocalla de Castelldefels (Barcelona), que se dedica a la fabricación de productos de fibrocemento.


La titular de ese juzgado considera que Rocalla, que fue absorbida por Uralita, incumplió la normativa sobre protección de la salud porque tenía la obligación de hacerse cargo de la limpieza de la ropa de trabajo de sus empleados y, en cambio, obligó a sus empleados a lavarla en casa.


Esta circunstancia "afectó a su esposa, al ser la persona que estuvo más en contacto con dicha ropa de trabajo, originándole una enfermedad pulmonar que no se cuestiona que está directamente relacionada con la inhalación de fibras de amianto, lo que le ocasionó la muerte", asegura la sentencia.


La juez desestima tanto que el caso haya prescrito como que Rocalla no fuera parte de Uralita, tal como sostenía esta empresa, ya que, según la sentencia, en 1982 Uralita ejercía el control de esta sociedad.


Por otra parte, el juzgado de primera instancia número 96 de Madrid debe resolver una macrodemanda contra Uralita, interpuesta por 43 personas representadas por este mismo bufete de abogados, que pretende que esta empresa sea condenada a indemnizar por las patologías causadas por el amianto a 21 personas de Cerdanyola del Vallès (Barcelona) sin relación laboral directa con la empresa.