Con la subida de las temperaturas y el cambio de estación, hay alimentos que cobran protagonismo, como sucede con los gazpachos, los licuados, las frutas y las verduras de temporada. "Estas -indica la bloguera de moda Isasa Weis- tienen la ventaja de que son más baratas y se puede disfrutar de ellas en su mejor momento de calidad y de valores nutricionales". Con ellas es posible elaborar distintas comidas sanas y fáciles que nos ayuden a cuidar la línea en verano.

Una opción típica del buen tiempo y que permite, además, innovar en la cocina son las ensaladas. Podemos preparar desde la clásica ensalada ilustrada con tomate rosa de Barbastro, atún y aceitunas negras a otras opciones más variadas como la ensalada de brotes, anchoas, queso, almendra y frambuesas; una ensalada de cacahuetes con paté de olivas negras o, bien, una ensalada veraniega presentarda en forma de tomate relleno. 

Para las cenas, un alimento que también admite diversas preparaciones para hacer comidas sanas y fáciles en verano es el calabacín. El queso es siempre un buen aliado para acompañar esta verdura, de manera que podemos preparar con ambos ingredientes una saludable receta de calabacines con queso de cabra y salsa pesto.

El gazpacho, elaborado siguiendo la receta de nuestras abuelas -a base de agua, un chorrito de vinagre, pepino, cebolla, ajo, pimiento, tomate, aceite y sal-, es otro clásico de las comidas sanas y fáciles que cobran protagonismo para el verano. Junto a este, las fresas se convierten en un delicioso postre de temporada que, combinándolas con un yogur, bien pueden solucionar una merienda veraniega sin sumar apenas calorías.  

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