Pintan bastos

En el contexto del intenso debate económico en el que está instalado el planeta desde que Putin invadiese Ucrania, día a día aparecen informes que no logran consensuar un pronóstico. El encargado por Ibercaja y la Cámara de Zaragoza a la Universidad descarta una recesión en Aragón, pero advierte que existe una gran incertidumbre. Los datos demuestran que estamos en una situación mucho más saneada que en 2008; no obstante, los gráficos también evidencian que la economía se está frenando. Al presentar el informe, el catedrático Marcos Sanso ha sido expresivo: «La desaceleración está clara y las perspectivas son difíciles: pintan bastos». En este contexto, urge adoptar decisiones como un pacto de rentas, del que tanto se habla, pero que sigue sin negociarse.

El informe destaca que 2021 fue un año de recuperación de la mayor parte de los indicadores, si bien la persistencia del coronavirus, la dificultad de reactivar las cadenas de producción globales y el aumento de los costes impidieron una recuperación mayor. De cualquier modo, 2022 ha generado un cambio de escenario: la invasión de Ucrania y el aumento de la inflación han añadido mayor incertidumbre de cara al futuro. Con todo, es necesario un esfuerzo colectivo para que el escenario más probable sea una fuerte desaceleración de nuestra economía y no una recesión.

Existe cierto consenso en que un pacto de rentas sería la forma de evitar una peligrosa espiral inflacionista si en paralelo a la subida de precios se registra un incremento de los salarios. Dicho pacto debería incluir ayudas a empresas con dificultades para afrontar su factura energética. El Gobierno es el responsable de convocar a todas las partes, desde empresarios a sindicatos, pasando por los partidos, las autonomías y los representantes del sector público. Es un reto complejo, pero también ineludible.