Controlar la viruela del mono
La viruela del mono está en Aragón o, al menos, hay sospechas fundadas de que sea así. La DGA estudia el primer posible caso. Se trata de un varón que cumple tanto el criterio clínico, al presentar alguno de los síntomas de infección, como el criterio epidemiológico, al haber estado en contacto con casos confirmados. Era previsible que la enfermedad llegase a nuestra Comunidad porque está en pleno proceso de expansión en España y en el resto del mundo. Aunque en la mayoría de las ocasiones no es grave, tanto la OMS como el Ministerio de Sanidad activaron las alertas a las pocas horas de conocerse los primeros casos, el 7 de mayo. Con la experiencia de la pandemia del coronavirus, que sigue activa, las autoridades tienen que demostrar que han aprendido la lección de cómo hay que reaccionar ante la propagación de una enfermedad.
En España ya son ocho comunidades, incluida Aragón, las que han detectado casos sospechosos de la viruela del mono. Por el momento, el mayor brote se concentra en Madrid. Además, nuestro país es el Estado de Europa con más infectados por este virus, seguido de Portugal y el Reino Unido. Aunque los expertos afirman que no se trata de casos graves y los síntomas suelen desaparecer a las cuatro semanas, el sistema de salud debe estar muy vigilante. Ayer mismo, la Organización Mundial de la Salud comunicó que es de esperar que sigan apareciendo personas infectadas y que la ruta de contagio todavía no se ha podido establecer.
La dura experiencia acumulada en más de dos años de covid define el camino a seguir con la viruela del mono: rastrear los contactos de los contagiados, localizar el origen de la transmisión de la enfermedad para pararla cuanto antes y aislar a los pacientes. Sin caer en alarmismos infundados, los servicios de salud deben estar en alerta ante este virus.
