Veinte años de Dinópolis
Veinte años después de su apertura, el éxito de Dinópolis da testimonio del valor que puede alcanzar una iniciativa bien planteada y desarrollada con ilusión y rigor.
Dinópolis, junto a la Fundación Conjunto Paleontológico de Teruel, ha conseguido aprovechar económica, social y culturalmente la riqueza de la provincia en fósiles de dinosaurio, uniendo la investigación paleontológica, la divulgación científica y el entretenimiento. Y junto a nuevos proyectos, continúan también produciéndose hallazgos de interés científico.
Es una feliz casualidad que el vigésimo aniversario de la inauguración, el 1 de junio de 2001, del parque temático haya coincidido con un nuevo y espectacular descubrimiento paleontológico en la provincia: un fragmento de cinco metros de la columna vertebral de un dinosaurio, hasta ahora desconocido, en Camarillas. En su capacidad de atraer visitantes, Dinópolis obtuvo un triunfo inmediato y ha continuado recibiendo una media de 150.000 personas al año, que suponen cuatro veces la población de la ciudad. En ese sentido es un pilar esencial para el turismo de la capital turolense, que se extiende también, gracias a las sedes de Territorio Dinópolis, por otros puntos de la provincia. Partiendo del poder evocador de los dinosaurios, cultivado por el cine, Teruel ha conseguido transformar sus depósitos fósiles en riqueza y en cultura, mediante una cadena que enlaza investigación científica, divulgación, entretenimiento, atractivo turístico y desarrollo territorial. En Dinópolis, lo lúdico, lo didáctico y lo científico se unen para proporcionar una experiencia variada y única. Dos décadas después, y a punto de superar el paréntesis de la pandemia, Dinópolis se prepara para continuar su plan de mejora y ampliación, que incluirá un nuevo edificio. Y sirve como ejemplo de lo que se puede conseguir aplicando talento, imaginación, conocimiento y esfuerzo a los recursos del territorio.
