Aniversario

Que te llame Stalin para preguntarte si un colega tuyo es un buen poeta, si es o no un maestro, tiene que producir susto o, dicho de manera más castiza, acojonar. 

No es lo mismo que si te llama Pedro Sánchez para hacerte una consulta sobre el museo del Prado.

La llamada de Stalin fue al escritor Boris Pasternak y se produjo a las dos de la mañana, estupenda hora para hablar de poesía con un dictador. El poeta por el que le preguntaba fue Ósip Mandelstam, que murió y desapareció en el Gulag, habiendo escrito antes que "la muerte es el único derecho que me queda".

A Pasternak le dieron el premio Nobel de literatura en el año 1958. Su novela ‘Doctor Zhivago’ influyó en esa decisión. Pero este escritor, al que insultaron sin piedad, tuvo que rechazar el premio y Nikita Jruschov, secretario general del Partido Comunista, lo desacreditó.

Y Jruschov hizo todo lo contrario con Yuri Gagarin, el primer cosmonauta que dio una vuelta alrededor de la Tierra con su nave espacial. Siempre me ha caído bien Gagarin. Fue portero en un equipo de jockey, le gustaba la farra y en el análisis psicológico que le hicieron se reflejó que entendía perfectamente lo que es la vida. Y un día como hoy, hace exactamente sesenta años, el 12 de abril de 1961, fue lanzado Gagarin al espacio, estuvo 108 minutos y regresó a la Tierra. Había desayunado un puré de carne.