Luchar por el patrimonio

Interior de las pinturas murales de fray Manuel Bayeu en la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes.
'Luchar por el patrimonio'
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El panorama que se vive desde hace meses a consecuencia de la pandemia, de la crisis económica y, también, política hace necesario destacar hechos positivos. Por ejemplo, iniciativas en la recuperación del patrimonio artístico aragonés, tantas veces maltratado. En otros casos se refiere a los pasos que dan algunas administraciones públicas y gentes del pueblo para conservar la riqueza cultural.

Destaca la buena marcha de las obras de restauración de la Cartuja de Nuestra Señora de las Fuentes, en Los Monegros. El conjunto pasó por la desamortización y el deterioro consecuente. Con la entrada de la Diputación de Huesca en 2015, la transformación ha sido muy importante. Terminadas las obras en el edificio de la antigua portería, donde se crea un centro de recepción de visitantes, se pasó a la cuarta fase, en la que se invierten 620.000 euros. Se ha actuado en el atrio principal, en el claustro y en los patios interiores. Mediante el acuerdo con la Escuela de Conservación y Restauración de Bienes Culturales de Aragón se consolidarán las pinturas murales de Fray Manuel Bayeu.

En las tres primeras fases de obras se invirtió más de un millón y medio de euros en la reparación general de las cubiertas, además de actuar en los vanos de iluminación y en las zonas afectadas por hundimientos. También se trabaja en la elaboración de un plan director del conjunto.

Noticia muy importante ha sido, también, la adquisición por el Ayuntamiento de Calanda del Convento del Desierto. Como recordaba el alcalde, Alberto Herrero, era una asignatura pendiente. Es un lugar emblemático, motivo de numerosas caminatas y excursiones. El Ayuntamiento ha pagado 93.000 euros y otros 120.000 se invertirán en el vallado, para evitar accidentes y un mayor deterioro. La restauración será una tarea de años y se deberá contar con la colaboración de las diversas administraciones.

En un frondoso paraje de pinares, ‘Desierto’ se refiere aquí al retiro espiritual de los carmelitas descalzos. A pesar del uso que se le dio como corral de ganado, conserva sus principales estructuras. Impresiona la austeridad y la dimensión de sus fachadas. A este gran conjunto barroco se le ha denominado ‘El Escorial aragonés’. Su futuro hubiera sido muy negro si no lo llega a adquirir el municipio. Es el primer paso para poder actuar. 

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