El reto de gestionar los fondos
Los fondos europeos que España espera recibir a partir de 2021 no solo deben proporcionar una importante ayuda para superar los efectos de la pandemia, también tienen que contribuir a la transformación de la economía. Pero su utilización efectiva supondrá un importante reto de gestión tanto para las Administraciones públicas como para las empresas. Aragón parte en esa tarea con alguna ventaja importante gracias a su experiencia de los últimos años.
Por distintas circunstancias, España es habitualmente poco eficaz en el aprovechamiento de los fondos europeos a los que podría tener derecho. Factores institucionales, trabas burocráticas o cuestiones económicas como el tamaño de las empresas influyen en esta realidad, que fue puesta de relieve recientemente por el gobernador del Banco de España. En los Presupuestos de la UE para el periodo 2014-2020, nuestro país solo consiguió validar proyectos por un importe equivalente al 35% de lo solicitado. Ahora el reto es mucho mayor, debido a la necesidad acuciante de esas ayudas y a la dimensión del fondo especial puesto en marcha por la Unión para la recuperación económica.
Sin embargo, Aragón parte de una mejor posición que otras regiones españolas, pues en los últimos años ha conseguido un porcentaje mucho mayor de las ayudas. La existencia de una especie de ‘ventanilla única’ en la Administración autonómica, especializada en la tramitación de fondos europeos y volcada en el asesoramiento a las empresas en ese terreno, es un aspecto diferencial y muy positivo. Hay que perseverar en ese mismo sentido, pues Aragón espera recibir unos mil millones de euros para proyectos que podrían tener un impacto favorable a largo plazo en la modernización de su economía. Una oportunidad que es vital aprovechar al máximo, con una gestión seria y eficiente, que coordine al sector público y al privado y movilice el gran potencial de nuestra región.
