Por
  • José María Gimeno Feliu

Hacer país

Opinión
'Hacer país'
Pixabay

La incidencia de la pandemia en esta segunda/tercera ola, con los efectos adversos sobre la salud y la situación económica y social, está poniendo en tensión nuestra arquitectura institucional y social. El contexto nos sitúa en una encrucijada como Estado y como sociedad. Por ello, conviene ‘hacer más país’ y mirar hacia el futuro. Es tiempo para la política de las ideas (y no de las ideologías) que ponga en valor los grandes consensos frente a la crispación de la política de bloques. Quizá convenga recordar las emotivas palabras del expresidente de Uruguay José Mujica sobre los fines de la política: "No debe ser un jardín para cultivar el odio". Hacer país exige una política de encuentros y pensar en el bien común y en la efectiva libertad. Hoy, por desgracia, hay más ruido que diálogo. Toca, en palabras del papa Francisco, acabar con la "cultura de los muros" (Encíclica ‘Fratelli tutti’, octubre 2020).

Hacer país exige más Estado, entendido como la suma de todos, poderes públicos, empresas y sociedad civil, en el empeño colectivo de construir, lo que exige estar abierto al cambio por el bien común como algo inherente a un país comprometido con las esencias de una verdadera democracia. Para ello urge asumir la importancia de modelos de colaboración público-privada alineados con el interés general, que refuercen los objetivos de los poderes públicos.

Por supuesto, hacer país es preservar las esencias de la división de poderes y del Estado de derecho, pues no hay democracia sin Ley ni sin control judicial independiente. El equilibrio es la clave para preservar el pacto social de nuestra democracia. Tensionar de forma indebida o comprometer la independencia de uno de los poderes sería un error imperdonable que podría conducir al abismo de un Estado fallido.

Hoy necesitamos pasión, y no odio. Compromiso y no revanchismo ni oportunismo. Confianza en lo que somos y queremos ser, con voluntad para levantarnos y avanzar en los cambios que necesitamos. Sin dejar a nadie atrás, todos juntos.

Son tiempos excepcionales, que obligan a adoptar decisiones excepcionales con responsabilidad y urgencia. Y, por ello, necesitamos, como advierte Miquel Roca Junyent, más transparencia y la mejor protección de los derechos constitucionales y de la seguridad jurídica. Los nuevos fondos europeos son la gran oportunidad para impulsar la necesaria transformación hacia una sociedad comprometida con la sostenibilidad social y ambiental y la justicia social, que aprovecha la digitalización para modernizar la organización y nuestro modelo público. En especial, los fondos de ‘Next Generation EU’ son la oportunidad para adaptar y fortalecer nuestro sistema de salud, lo que exige una revisión tanto de la política de personal sanitario como de la gestión pública y de acceso a la mejor tecnología, es decir, a las mejores soluciones innovadoras que deben alinearse para poner el foco sobre el paciente.

Por último, hacer país exige más ciencia, más conocimiento y mejor información. Solo desde el talento se puede alcanzar el necesario liderazgo institucional de nuestro país. Lo que exige más inversión efectiva en universidades, en centros de investigación e innovación (que son los cimientos sobre los que construir el futuro) y una vocación por impulsar, más allá de las ideologías, una toma de decisiones en temas públicos avalada por el conocimiento, lo que aconseja comités de verdaderos expertos independientes, con credibilidad social –lo que exige que su composición sea pública–, que aportan la confianza necesaria a la ciudadanía, muy especialmente en escenarios de riesgos.

Hacer país es nuestro reto. Corresponde a todos los agentes, también a los ciudadanos desde su cuota de responsabilidad y compromiso social, hacer posible nuestro futuro. Ojalá de la pandemia, salgamos más fuertes y comprometidos con un proyecto de país moderno, comprometido con Europa y lo que ello significa, diverso, que sabe escuchar, que impulsa desde las ideas la mejor calidad de las prestaciones a la ciudadanía y que hace de la libertad, el conocimiento y el equilibrio de poderes su seña de identidad.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión