Miles de agricultores se concentraron ayer en Zaragoza para protestar por los bajos precios y la poca rentabilidad de sus explotaciones. El sector primario es prioritario a fin de asegurar alimentos de calidad a nivel global. Por lo tanto, Europa debe liderar una respuesta a las demandas que llegan desde el campo. Para Aragón es un auténtico reto el ayudar a los jóvenes agricultores a hacer viable su futuro

Convocados por las organizaciones agrarias, los agricultores y ganaderos se movilizan en Aragón y el resto de España en defensa de un futuro con explotaciones viables y por el reconocimiento por parte de la sociedad del papel de la actividad agraria para la producción de alimentos de calidad. El sector denuncia con razón la caída de renta de casi un 9% registrada en la última campaña, sobre todo por el comportamiento negativo de los precios y la falta de mecanismos para la defensa de la estabilidad de los mercados. También reclama que la anunciada reforma de las ayudas europeas de la PAC, que suponen de media un 25% de los ingresos de una explotación, mantenga recursos suficientes, frente a los recortes anunciados por Bruselas.

La agricultura, la ganadería y la agroindustria conforman un sector muy relevante en Aragón, con unos 37.000 puestos de trabajo. Y tienen un gran futuro por la creciente necesidad de alimentos y de lograr energía a través de soluciones naturales. Ahora bien, ¿hay jóvenes dispuestos a incorporarse al sector? ¿Son sostenibles los nuevos agricultores? Desde las administraciones tiene que haber respuestas: buenos tratados comerciales con terceros países, una ley que regule el reparto de beneficios en la cadena alimentaria y la política de ventas a pérdidas, facilitar tierras e infraestructuras, formación y también elementos que mejoren la calidad de vida en el entorno rural. Todo es necesario para aprovechar las novedades tecnológicas, la disminución de los costes de producción y las responsabilidades medioambientales.