Adoctrinamiento en Cataluña
Pedro Antonio Heras Caballero publicó en primavera, en Editorial Almuzara, el libro ‘Educar en la mentira’, donde, aunque contempla libros y manuales de historia para primaria o secundaria tanto de Cataluña como del País Vasco, incide más en la primera (282 páginas sobre 412). Ha sido profesor titular de Historia Contemporánea en la Universidad de Tarragona.
Recuerda el autor que en 1990 se filtró a la prensa un documento de CiU con unas rígidas directrices sobre lo que había que enseñar en Cataluña, consistentes en hacer un esfuerzo planificado para inculcar una especie de catecismo nacionalista, tendencialmente independentista, y con su ideología (totalitaria, cabe afirmar) de la superioridad de los catalanes. Y demuestra que esas directrices, a la vista de los manuales, se cumplen desde entonces a rajatabla. Los manuales y otros libros de historia los ha leído el autor casi todos, con un sistema de citas de sus diversos pasajes muy preciso, aunque en ocasiones admite que en algunos se dan explicaciones neutrales de asuntos concretos y en otros ni eso: o sea, siendo todos muy tendenciosos, o son muy malos o peores.
Traslado del libro citado, que no comparto del todo, algunas ideas ilustrativas. El origen de Cataluña como "nación" se sitúa hace más de un milenio, conforme a escritos de Jordi Pujol (ridículos, en el plano académico) que fechan tal acontecimiento cuando el Conde Borrell II (947-992) se negó, por una disputa, a renovar el vasallaje al rey de los francos, como si eso independizara una "nación". Se enfatiza la Edad Media, pero desaparecen casi del todo de los manuales, los romanos, los visigodos o los moros, porque esas etapas históricas permiten vislumbrar, en situación embrionaria, una amplia nación peninsular tendente a su unidad. En la Edad Media aparecen las consabidas manipulaciones de lo que fue la Corona de Aragón, transmitiendo la idea de que los catalanes de entonces tuvieron reyes suyos y plena soberanía (Corona o Federación catalano-aragonesa; etc.).
Los manuales maldicen el Compromiso de Caspe de 1412, que aumentó la influencia de Castilla, sin explicar bien el contexto histórico. Les causa desazón Fernando el Católico y el descubrimiento de América, describiendo a los Reyes Católicos como crueles y despóticos, al expulsar a los judíos e instaurar la nueva y cruel Inquisición. Pero, señala Heras, estos Reyes también hicieron cosas buenas y el antisemitismo era general en Europa en ese momento, ocultándose en los manuales que en Barcelona y Cataluña también se habían dado antes de la expulsión matanzas de judíos. La conquista de América se presenta con sus tintes más negros como salvajada y genocidio de los indios, lo que es una verdad parcial porque se ocultan el atraso y brutalidad de las civilizaciones entonces vencidas y desplazadas y que la mayor cantidad de muertes de los invadidos se debió al contagio de enfermedades y no solo a la crueldad de los invasores. Aunque los manuales nunca usan el término España (siempre "Estado español"), al describir las matanzas de los indios sí se atribuyen a «los españoles». No se descuida la transmisión subliminal de ideas.
Se explican con graves omisiones y falsedades la crisis en Cataluña de 1640-1641 y la Guerra de Sucesión de principios del siglo XVIII. Y se oculta que en el siglo XVIII Cataluña se enriqueció mucho. En el siglo XIX se silencia, por ejemplo, la tenaz oposición de la burguesía catalana a toda independencia o autonomía para Cuba para proteger sus beneficios en el tráfico de esclavos. Se silencian los numerosos asesinatos (857) de ETA durante 50 años, aunque se recuerdan las ejecuciones al final del franquismo de "militantes antifranquistas". Y algún manual justifica el terrorismo de Terra Lliure, al que atribuye solo "acciones contundentes" (sic: 160 atentados y varios asesinatos, alguno con condena penal firme).
El trabajado libro de Heras deja mal a los que niegan el adoctrinamiento en Cataluña (los separatistas y sus aliados) y evidencia las responsabilidades durante décadas de muchos historiadores catalanes y, por omisión, de todos los gobiernos españoles. Se duele el autor también del silencio de la Iglesia ante tanto burdo adoctrinamiento para el odio.
José Luis Moreu Ballonga es catedrático de Derecho civil (Unizar)