Los horarios del AVE
El rápido enlace ferroviario con Madrid y Barcelona permite a las empresas sacar un mayor partido a la ubicación de Zaragoza entre las dos principales capitales españolas. En ese sentido, el AVE se ha convertido en una herramienta de trabajo indispensable. Y para que funcione correctamente, la clave está en los horarios. De manera que Renfe debe tener muy en cuenta las necesidades de las empresas zaragozanas a la hora de programar los trenes.
Que el primer tren que cada mañana enlaza Zaragoza con Madrid llegue a la capital de España a las 8.50, como ocurrirá con el nuevo horario previsto por Renfe, en lugar de a las 8.40, como sucedía hasta ahora, puede parecer un cambio menor. Pero para muchas empresas zaragozanas tiene una importancia capital. Esos diez minutos de retraso dificultarán llegar a tiempo a citas de negocios y reuniones de trabajo, actividades para las cuales las 9 de la mañana suele ser una hora de referencia. En muchos casos, los desplazamientos tendrán que anticiparse para hacer noche en Madrid, con los consiguientes trastornos y gastos. La prueba del perjuicio que esa variación puede causar está en la rápida reacción que el anuncio del nuevo horario ha provocado en las organizaciones empresariales aragonesas. Tanto la Cámara de Comercio como CEOE Aragón han expresado su desacuerdo y, respaldadas por el Ayuntamiento y por el Gobierno de Aragón, piden a Renfe que mantenga el horario de ese primer tren así como el del AVE de regreso a última hora de la tarde. No debería ser difícil satisfacer una demanda que está sobradamente justificada, quizás anticipando la hora de salida del convoy o modificando los planes de distribución del material rodante. En todo caso, tanto Renfe como el Adif deberían tener siempre en cuenta que el servicio ferroviario es fundamental y que, antes de tomar decisiones, tienen que consultar con los territorios que pueden verse afectados por ellas. Es lo lógico.
