La primera lección sobre los resultados electorales es obvia: Vox ha herido mortalmente al PP, pero apenas ha sacado beneficio de este desaguisado que ha provocado en la derecha.

La segunda es que el PSOE ha ganado con holgura precisamente gracias a que ha funcionado el voto del miedo a Vox. De manera que Vox ha conseguido contribuir al triunfo del PSOE y mandar casi al ostracismo al PP.

Tercera conclusión o lección de estas elecciones es que la derecha tiene más votos que la izquierda aunque la ley D’Hondt ha favorecido a la izquierda por la fragmentación del voto en la derecha.

Cuarta lección: Vox también ha conseguido movilizar el voto de los partidos independentistas y nacionalistas: ahí está el triunfo de ERC, de Bildu, etc.

En quinto lugar, el PP tiene que afrontar un cambio que podría pasar por un cambio de liderazgo.

Y sexta lección, aunque Ciudadanos ha obtenido un buen resultado, no ha conseguido superar al PP, pero esto no es lo importante sino que el empecinamiento de Albert Rivera en estigmatizar al PSOE y asegurar que jamás pactará con Pedro Sánchez dificulta un gobierno de coalición de centro-izquierda.

Séptima lección: Podemos ha sufrido un duro revés que debería de llevar a sus líderes a hacer autocrítica por más que puedan salvar los muebles si pactan con Pedro Sánchez y entran en el Gobierno.

A voz de pronto estas son las conclusiones de estas elecciones. Seguramente este domingo fue la noche más dulce de Pedro Sánchez desde que irrumpió en política. Ojalá su triunfo sea para bien.