Finaliza la restauración del tapiz de Roda, robado en 1979 y que volverá a Huesca

El tapiz 'De la Virgen y San Vicente', del siglo XVI será cedido al Museo Provincial de Huesca.

Concluye la restauración del tapiz de Roda de Isábena, robado en 1979 y que volverá a Huesca
Finaliza la restauración del tapiz de Roda, robado en 1979 y que volverá a Huesca
Enrique Cidoncha

El ministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, ha anunciado que ha concluido la restauración del tapiz de Roda de Isábena y que será cedido en depósito al Museo Provincial de Huesca, a donde será trasladado en una semanas.


Wert ha hecho este anuncio en rueda de prensa con la presidenta del Gobierno de Aragón, Luisa Fernanda Rudi, con la que ha firmado un protocolo de colaboración para impulsar el proyecto 'Corona de Aragón. Historia y Arte' que ha puesto en marcha el ejecutivo autonómico.


El tapiz 'De la Virgen y San Vicente', del siglo XVI, fue robado por el famoso ladrón de arte en 1979 de la catedral de Roda de Isábena, de la que Erik el Belga se llevó otras obras de arte. La pieza, titularidad de la Iglesia al desaparecer, fue localizada por la Guardia Civil en Estados Unidos propiedad de un coleccionista que la había adquirido en una subasta.


Tras acreditar el origen del tapiz, la obra fue requisada a su nuevo propietario por las autoridades estadounidenses y entregada a España, por lo que la pieza pasó a ser patrimonio del Estado, han explicado fuentes del Ministerio de Cultura.


De vuelta al país en 2013, el tapiz ha sido restaurado por el Instituto de Patriminio Cultural de España. Las mismas fuentes han explicado que no se encontraba muy deteriorado y que el trabajo ha concluido.


El ministro de Cultura ha explicado que se está organizando el traslado y que podrá tener lugar en cuestión de unas semanas. El Museo Provincial de Huesca, de titularidad estatal y gestión autonómica, también tiene que prepararse para acoger esta obra de arte del siglo XVI, que quedará así expuesta al público de nuevo.


Erik el Belga se hizo famoso por el robo de unas 6.000 piezas de arte sacro, aunque décadas después se reconvirtió en mecenas y pintor y explicó su azarosa vida en el libro 'Por amor al arte'.


En el caso de este tapiz, lo robó de la catedral de Roda de Isábena en diciembre de 1979. Se trata de una pieza creada originalmente como frontal de altar, en el primer cuarto del siglo XVI en los Países Bajos.