Cientos de fans aguardaban a las puertas de El Corte Inglés de Puerto Venecia de Zaragoza con motivo de la firma de discos de su primer trabajo, 'Lo mejor está por venir'. Los gemelos sevillanos Jesús y Dani Oviedo, de 15 años, más conocidos como los 'Gemeliers' ha sido uno de los grandes descubrimientos del espacio televisivo 'La voz kids'. Aseguran que están viviendo uno de los mejores momentos de su vida, o como ellos dicen: "Estamos cumpliendo un sueño".

De ahí el nombre que han elegido para su primer LP, una declaración de intenciones de lo que esperan sea su futuro profesional. "Cuando nos eliminaron en 'La voz kids' pensábamos que era el final, que íbamos a caer en el olvido, hasta que nos ficharon de Pep's Records", explica Dani.

A pesar de su corta edad y de tener más de 200.000 seguidores en la red social Twitter aseguran tener los pies en la tierra. "El mundo de la música es muy difícil, y tan pronto estás en el top como en lo más bajo. Hay que vivir el presente y, por si acaso, tener un plan B", asegura Jesús.

Y su plan B es seguir con sus estudios. En cuanto a compaginarlos con la carrera musical, creen que no será un problema. "Hemos sacado buenas notas y todavía tenemos 15 años, es muy pronto para saber lo qué queremos estudiar", afirma Dani. .

Las más fans

Mientras tanto, decenas de fans de entre 12 y 16 años permanecían a la espera de que sus jóvenes ídolos aparecieran. Las chicas llevaban bolsas con regalos, sobres, globos, pancartas de colores y sus nombres escritos en mejillas y brazos. El alboroto a veces era interrumpido por los gritos y chillidos provocados por las falsas alarmas algrito de "ya llegan".

Aunque la firma comenzaba a las 17.00, había fans que se habían pegado un buen madrugón: "He llegado a las 6.40 de la mañana para estar la primera", aseguraba Sonia, zaragozana de 12 años a la que había acompañado su madre. "Mis padres se han puesto histéricos pero al final me he salido con la mía", explicaba Didi, de 16, que había llegado muy bien preparada, con bocadillos y souvenires para aguantar más de diez horas. "Hemos estado hablando, cantando, y haciendo tiempo, pero se nos ha pasado volando", añadía.

A su lado, Karima mostraba orgullosa todos los obsequios que había preparado para los jóvenes artistas: "Les he comprado una pulsera a cada uno, y les voy a dar una carta diciéndoles que me encanta su música", explicaba.

Al otro lado de la fila, los padres permanecían atentos a lo que ocurría: "He traído a mi hija y sus amigas y me he ido a dar una vuelta, pero llevamos aquí desde las 10 de la mañana", reconocía Iván. "Merece la pena por verlas felices", añadía Óscar, otro padre entregado a este fenómeno fan por partida doble.