Algo más que una ONG musical
La Asociación Musethica, nacida en Zaragoza en 2012, acaba de celebrar su décimo aniversario.
Durante la presente semana, ha organizado su primer Festival 2023 con una veintena de conciertos en escenarios tan poco habituales como la Fundación DFA o la cárcel de Zuera.
El colofón consistió en una actuación abierta al público ofrecida el viernes, día 10, en el Auditorio de Zaragoza. Es revelador el comentario de un aficionado consistente y exigente, tras asistir a la sesión: «Uno de los más bellos conciertos de cámara que hemos oído. El repertorio, simplemente genial»
Tras lo anterior, podría hacerse un repaso músico a músico, obra a obra y movimiento a movimiento del programa ofrecido, consistente en el ‘Quinteto de cuerdas Kreutzer Sonata, Op. 47’, de Beethoven, y el ‘Quinteto de cuerdas nº 2 en Sol Mayor, Op. 77’, de Dvorak, relatando la meticulosidad interpretativa y la excelencia sensitiva como factor común de una sesión cuyo detalle pudiera llevar varias páginas.
Dirigidos por la maestra Erica Wise, al violonchelo, y el maestro Avri Levitan a la viola, los ocho músicos que, mediante duras pruebas de acceso, consiguieron integrarse en el programa para este Festival, bordaron las obras a un nivel más propio de intérpretes avezados, cotizados y experimentados que de jóvenes veinteañeros con las carreras terminadas y en progreso evidente, a juzgar por las sucesivas intervenciones durante toda la semana, y en particular por el concierto final en el Auditorio.
Algunos detalles: el ataque preciso de los violines en el ‘Adagio sostenuto’, primer movimiento de la obra de Beethoven, sobre el ‘pizzicato’ de los demás instrumentos; el floreo del segundo violín en el ‘Andante con Variazioni’ siguiente; la brillantez del ‘Finale Presto’ con que concluye la pieza.
En la obra de Dvorak, un espíritu jubiloso impregnó sus cuatro movimientos.
