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Joaquín Martón y Gavín, el jurista olvidado que mimó a los locos y descubrió rastro del 'Vidal Mayor'

José Ignacio López Susín, director general de Política Lingüística, publica la historia de este formidable aragonés en 'Una vida en el Derecho'.

Retrato del jurista, político liberal y emprendedor Joaquín Martón y Gavín (1835-1905).
Retrato del jurista, político liberal y emprendedor Joaquín Martón y Gavín (1835-1905).
Archivo Rolde.

No todos los juristas pueden ser Joaquín Costa, pero a veces en Aragón hay grandes figuras, estudiosos y eruditos del Derecho aragonés, que han caído en el olvido. Un buen ejemplo es Joaquín Martón y Gavín, jurista y político aragonés, nacido en Biescas (Huesca) en 1835 y fallecido en Barcelona en 1905, al que José Ignacio López Susín (Zaragoza, 1956) le dedica su libro ‘Una vida para el Derecho’ (Rolde), algo más de un centenar de páginas. Se trata de un hombre inquieto, bien relacionado, hiperactivo, que ostentó muchos cargos: fue decano del Colegio de Abogados de Zaragoza (se colegió en 1876), juez en Zaragoza, magistrado en Granada y Madrid, presidente de la Audiencia de Barcelona, presidente de la Diputación de Zaragoza en dos períodos, de 1872 a 1873, diputado en Cortes, teniente de alcalde del Ayuntamiento de Zaragoza, presidente del Ateneo zaragozano, y algunos cargos más que casi resultan abrumadores. Ya de paso, perteneció al Partido Liberal Monárquico, y fue vicepresidente desde 1868.

Por sumar datos como más concretos, por decirlo así, explica López Susín, fue “impulsor del ferrocarril de Canfranc y llamó a los zaragozanos a que se manifestasen a favor del proyecto, y lo logró -dice el autor de ‘Gente de leyes. El Derecho aragonés y sus protagonistas’ (BarC, 2004)-. Y, entre otras cosas, fue el creador del primer psiquiátrico en Aragón, Nuestra Señora del Carmen, donde está ahora el Teatro de las Esquinas. Hizo un viaje por Europa con una comisión institucional para ver cómo eran esos hospitales o manicomios e importar sus modelos a Zaragoza”.

¿Cómo llegó a Joaquín Martón y Gavín el director general de Política Lingüística del Gobierno de Aragón? “Desde hace años, por mi profesión y mi pasión, intento completar mi biblioteca de Derecho aragonés del siglo XIX. Conocía a Martón, lo citaba en ‘Gente de Leyes’, pero no lo había estudiado con detenimiento. Pude hacerme con varios volúmenes que publicó con Francisco Santapau, y allí descubrí algo de lo que ni sabía nada ni había oído hablar jamás. En uno de sus libros incluye un vocabulario de términos aragoneses a las ‘Observancias’, un glosario de 158 términos que incorporo al libro. No es que sea nada del otro mundo, pero es interesante, y recoge una voz que no está documentada: ‘fide fodocincul’, que quiere decir ‘hijo de sodomita’ o ‘hijo de puta’”, dice López Susín.

José Ignacio López Susín alterna su pasión por el Derecho con el amor a las lenguas de Aragón.
José Ignacio López Susín alterna su pasión por el Derecho con el amor a las lenguas de Aragón.
Archivo DGA.

Su rastreo ha sido exhaustivo. Documenta la historia familiar, el expediente escolar en Jaca, los estudios en Zaragoza (adonde la familia se trasladó en 1854) y Madrid, y también un curso en Barcelona. “Debió vivir allí un año entero porque solo faltó cinco veces a clase. Y poco a poco comienza su gran carrera. Era un hombre bien relacionado. Fue el auténtico factótum del Congreso de Juriconsultos Aragoneses. Costa lo llamó ‘la lengua del Congreso’”, matiza. Se relacionó con todo el mundo, se carteó con Joaquín Costa (en el archivo del polígrafo hay muchas cartas suyas) y Basilio Paraíso, empresario y prócer de Zaragoza y de la Exposición Hispano-Francesa de 1908.

"Fue el creador del primer psiquiátrico en Aragón, Nuestra Señora del Carmen, donde está ahora el Teatro de las Esquinas. Hizo un viaje por Europa con una comisión institucional para ver cómo eran esos hospitales o manicomios e importar sus modelos a Zaragoza”, dice López Susín

Julio Martón y Gavín, entre otras cosas, fue clave en la historia del descubrimiento del ‘Vidal Mayor’, el gran libro de los fueros aragoneses del siglo XIII. “En uno de sus libros, escrito con Santapau, Martón agradece que el jurista Franco y López haya puesto a su disposición ‘un precioso códice de nuestra legislación, que posee manuscrito, del siglo XIII’. Era un manuscrito iluminado de fueros, una auténtica joya. Y también decía que Pascual Savall tenía otro manuscrito de los Fueros del Sobrarbe. Y sería Gunnar Tilander, el gran estudioso del ‘Vidal Mayor’, quien halló ese libro de Martón y Santapau en la Biblioteca Nacional en 1933 y decidió seguir su rastro. Se entrevistó con el hijo de Franco y López". Al parecer, tal como recordaba Mariano García en HERALDO el pasado agosto, se vendió "a un comerciante británico, que la llevó a Sotheby’s de Londres en 1958. Cuatro años más tarde reapareció en Aquisgrán, y cambió de manos, y este le dijo que se vendió a la Fundación Getty, que es quien tiene el manuscrito" desde 1983. Tilander lo acabará estudiando y editando más tarde”. López Susín cuenta, además, que Joaquín Martón y Gavín impartió el 9 de mayo de 1889, una conferencia sobre el ‘Vidal Mayor’ en el Centro Mercantil con el título ‘Trabajos literarios de don Vidal de Canellas, célebre obispo de Huesca en el siglo XIII”. Unos días después recibirá una misiva de gratitud de Basilio Paraíso.

Aquí José Ignacio López Susín hace una leve pausa: “¿Sabe que se está haciendo un documental sobre el ‘Vidal Mayor’. Lo dirige Isabel Soria, y en él, entre otros, participarán grandes expertos: Agustín Ubieto, que reeditó el libro en edición facsímil en el Instituto de Estudios Altoaragoneses; los catedráticos Jesús Delgado Echevarría y Carmen Bayod; el escritor y filólogo aragonés Francho Nagore; y yo mismo, entre otros. Por ahora aún no hemos hecho el guion: lo haremos después de oír las entrevistas”, dice López Susín, que asumirá labores de coguionista.

“En uno de sus libros, escrito con Santapau, Martón agradece que el jurista Franco y López haya puesto a su disposición ‘un precioso códice de nuestra legislación, que posee manuscrito, del siglo XIII’. Era un manuscrito iluminado de fueros, una auténtica joya", el 'Vidal Mayor', dice López Susín

‘Una vida en el Derecho’ cuenta, con rigor, muchas cosas más de Martón y Gavín: su labor entusiasta, su condición de diputado en Cortes, sus disputas y también deja ver su carácter batallador, su copiosa bibliografía, sus innumerables cargos (el autor incluye un cuadro de datos biográficos, actividad social, política y profesional), sus estancias en Jaraba para tomar los baños, etc. El diario ‘La República’ no le ahorró críticas: “El Sr. Martón se distingue precisamente por su aversión a todo lo que es progresista, por su retraimiento de todo lo que es revolucionario, por su prevención a todo lo que es popular”.

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