Festival Dispar Danza sin obstáculos y accesible para público y artistas
El festival, en el que colabora Zaragoza Cultural, se celebrará los días 27, 29 y 30 de octubre en Etopia y en el Centro Cívico Río Ebro.
La segunda edición del Festival Dispar llega a Zaragoza a finales de octubre con el objetivo de promover las artes escénicas, y especialmente la danza contemporánea, sin obstáculos y hacerla completamente accesible tanto para el público como para los artistas.
La entidad Pares Sueltos promueve este evento, que se basa en el artículo 27 de la Declaración Universal de los Derechos Humanos: "Toda persona tiene derecho a tomar parte libremente en la vida cultural de la comunidad y a gozar de las artes".
Violeta Fatás es una de las codirectoras del festival y cofundadora de Pares Sueltos, que trabaja por una danza "en la que quepan otros cuerpos y otros relatos" y que aspira a un arte "libre de barreras físicas y mentales".
Con ese objetivo se impulsa, con la colaboración de Zaragoza Cultural, el Festival Dispar, que se celebrará los días 27, 29 y 30 de octubre en Etopia y en el Centro Cívico Río Ebro.
Fatás ha explicado en rueda de prensa que el 27 de octubre se ha programado en Etopia un taller con actuación con Santiago Latorre y Sara Paniagua llamado "La arquitectura de la Amistad".
Latorre, músico afectado por una lesión en ambas manos, comenzó a experimentar con sensores de movimiento en 2016 y de esa experimentación nació el proyecto que se exhibe ahora, completado con sistemas de manipulación de luz y sonido a través del movimiento.
El 29 de octubre, en el Centro Cívico Rio Ebro, elegido por tener muy buen accesibilidad para los artistas, se celebrará una velada de danza en la que se mostrará el trabajo de cuatro compañías (de Cataluña, Andalucía, País Vasco y Francia) en cuyos elencos y equipos técnicos hay artistas con diversidad funcional.
Esta velada incluye como novedad, además de traducción al lenguaje de signos, un sistema de audioguía para personas con diversidad visual impulsado por Latrium, laboratorio de la Universidad de Murcia para la traducción inclusiva.
Ya el día 30, una de estas compañías, llamada "Habrá que ponerse cachas", ofrecerá un taller de danza en Etopia abierto a cualquier persona, con cualquier nivel, con o sin diversidad funcional.
Fatás ha explicado que este año, además, se incluye como novedad una medida de apoyo a personas con hipersensibilidad sensorial.
Eva Sanmartín, técnica de Cultura, y diagnosticada con síndrome del espectro autista, ha explicado en la rueda de prensa que este método, que ya se puso en marcha recientemente en la Feria de Teatro y Danza de Huesca, se basa en la creación de iconos que facilitan a las personas con enfermedades neurodivergentes (dislexia, déficit de atención o autismo, entre otras) la asistencia a los espectáculos.
Así, se informa de la cantidad de ruido, de si hay luces directas hacia el público o si existe contacto físico, porque para estas personas es importante saber con anticipación lo que puede suceder para que puedan prepararse antes de asistir a un espectáculo.
Ha apelado a la empatía de las compañías y a la responsabilidad de las instituciones para ir incorporando medidas que faciliten que todo el ocio sea inclusivo.
Las entradas para el festival y las inscripciones ya están disponibles en la web de Pares sueltos.
