El Festival Periferias regresará un año más a Huesca, y ya van 22, con el objetivo de seguir siendo un breve pero intenso espacio de libertad cultural. Y lo hará con una programación "más ecléctica que nunca" en torno al concepto de ‘Revival’ en distintas vertientes: lanzar una mirada al futuro a partir de acontecimientos como el regreso de discursos de odio y los conflictos bélicos que parecían cosa del pasado; reflexionar sobre cómo el arte se inspira en las influencias antiguas y contemporáneas para renovarse; y por cómo se asocia con la vuelta a la fiesta tras la pandemia.

Del 21 al 29 de octubre, la capital oscense será escaparate de las vanguardias artísticas con una treintena de conciertos, exposiciones, actuaciones teatrales y proyecciones de cine, entre otras actividades. Un 70% serán gratuitas y para las de pago habrá un bono por 40 euros y entradas a precios populares. Se podrán adquirir a partir del viernes 14 de octubre en la página web www.periferias.org. El presupuesto de este año es de 130.000 euros, ligeramente superior al de 2021.

El concejal de Cultura, Ramón Lasaosa, remarcó este martes en la presentación del programa que Periferias "es un festival multidisciplinar con la mirada puesta en la cultura contemporánea y que busca la creación de un espacio de reflexión. Tenemos que programar para entretener, pero también para pensar y reflexionar". Además de los espacios habituales como el Palacio de Congresos, el Centro Cultural Manuel Benito Moliner, el CDAN o el Teatro Olimpia, también se abrirá esta vez a la Sala Genius/Bendita Ruina y el Edén.

Mientras, la diputada de Cultura, Maribel de Pablo, destacó también que Periferias «es un festival muy especial y con sello único, que mantiene su esencia de reflexionar sobre lo desconocido, lo diferente, las vanguardias y los nuevos movimientos».

Como explicaron el jefe de Servicio del Área de Cultura, Lucas Fernández, y la técnico del área, Pilar Barrio, Periferias arrancará el 21 de octubre con la inauguración de dos exposiciones que darán a conocer las miradas de Dani Rabaza (Münster Studio), autor del cartel de este año, y de Elena Lavellés. El primero presenta una retrospectiva de su trabajo en carteles para conciertos, festivales, teatro y portadas de discos impresos manualmente; y la segunda investiga la sostenibilidad social y medioambiental a través de la recuperación del patrimonio cultural y de la transmisión de conocimiento con prácticas neorurales.

Las artes escénicas tendrán un hueco muy importante con ‘Maña’ de la compañía de Manolo Alcántara, donde a través del circo y del equilibrio se construye en directo un arco de medio punto medieval; ‘Control freak’, del israelí Kulu Orr, con una mezcla de circo, música y la tecnología más puntera; ‘La reina del metal’, de Vanesa Aibar, donde trabaja la relación del flamenco con la tecnología y la danza contemporánea; y también ‘I’m a survivor’, de Proyecto 43-2, donde una madre y su hija hablarán del duelo, de la pandemia y la supervivencia.

Dancehall, hip hop, punk...

Sin duda, la música volverá a ser la gran protagonista con artistas noveles muy jóvenes como la argentina afincada en Barcelona Simona, que renueva el lounge desde lo latino con toques de R&B, trap o reggaeaton; los canarios Highkili & Woodhands, que transitan estilos relacionados con el dancehall, el dembow o el neoreggaeton; el homenaje a la Generación de 27 a cargo de la icónica banda de Lagartija Nick; el espectáculo ‘La Arquitectura de la Amistad’ del artista sonoro Santiago Latorre, a medio camino entre el audiovisual, la performance y la música; la Huesca Big Band, que adaptará su repertorio habitual al concepto de ‘Revival’; la catalana Marina Herlop que fusiona su formación clásica con la electrónica contemporánea; el colombiano N Hardem, un artista del hip hop más clásico de los 90; Grande Amore, que desde el underground gallego relaciona su trabajo con el post-punk y la electrónica industrial; o La Élite, un dúo de punk que explora un nuevo lenguaje con musical la electrónica.

También habrá artistas internacionales que visitan España por primera vez como la musicóloga polaca Ladies on Records, que compartirá su particular mirada a la música oriental de los años 60, 70 y 80 hecha por mujeres; y la banda holandesa Yin Yin, que propondrá un viaje alucinógeno a través del funk, la psicodelia y el pop. Ellos tendrán su contrapunto nacional con Derby Motoreta’s Burrito Cachimba, una de las bandas nacionales más aclamadas de la psicodelia.

La mirada comprometida del cine

El cine estará presente con las proyecciones de ‘Cuando el destino nos alcance’, una cinta de 1974 que soñaba con un futuro que es presente al estar ambientada en la Nueva York de 2022; ‘El año del descubrimiento’, que narra una parte de la historia de España que se desarrolló en paralelo a los fastos por el 500 aniversario del descubrimiento de América poniendo su mirada en los disturbios sindicales; ‘Rendir los machos’, premiada en la última edición de Festival de Sevilla, que se adentra en los contrastes entre el desarrollo turístico y la tradición rural de Canarias; y también la película de animación ‘Unicorn wars’ con una revisión de los seres mitológicos.

El público familiar tendrá una variada oferta con un taller de las Ludotecas Municipales para crear un telar concebido como una intervención urbana; la obra ‘Ventanas’, de Teatro Paraíso, premio Fetén 2022 al mejor espectáculo para la primera infancia; y ‘Volver al cuento’ de Pablo Albó para celebrar el aniversario de la Biblioteca Durán Gudiol.

Y en el apartado dedicado al pensamiento y la reflexión, el festival ha invitado a Moha Gerehou, un periodista nacido en Huesca en 1992 de origen gambiano que contará cómo el racismo sigue habitando la cultura contemporánea; y a Makhloot, un artista de hip hop afgano recientemente afincado en Huesca que explicará su huida de los talibanes. "No podemos olvidar que la cultura al final es política y queremos contribuir con nuestro trabajo a construir sociedades más justas e igualitarias", subrayó Lucas Fernández.