El enigmático regreso a las redes de Enrique Bunbury por su 55 cumpleaños: “¿Qué estará escribiendo el maestro?”
Coincidiendo con el aniversario del cantante zaragozano, reparamos sus orígenes y evolución musical, desde sus inicios con la mítica banda Héroes del Silencio.
Si hace tan solo unos días repasábamos la trayectoria de Amaral con motivo de los 50 años de su vocalista, Eva, en esta ocasión toca hacerle nuestro pequeño homenaje a otra estrella de la música zaragozana. Y es que este jueves, 11 de agosto, Enrique Bunbury celebra su 55 cumpleaños. Un aniversario que el rockero ha celebrado, para alegría de sus fans, regresando a las redes sociales, tras borrar todas sus publicaciones la pasada semana. Y lo ha hecho con una foto en la que aparece escribiendo lo que aparentan ser unos versos. “Puede ser una simple metáfora de “estoy escribiendo, no estoy quieto” o simplemente otro de esos gestos enigmáticos que tanto le gustan desde siempre”, señala el periodista de HERALDO Pablo Ferrer.
La publicación ha generado gran expectación entre sus seguidores en Instagram, que en los comentarios de la publicación manifiestan su contento por su reaparición, al tiempo que se preguntan qué querrá expresar con dicha fotografía: “¿Qué estará escribiendo el maestro?", se pregunta uno.
El artista, que el pasado mes de febrero había anunciado su adiós de los escenarios a partir de septiembre, se vio obligado a anticipar dicha retirada, suspendiendo su gira de despedida, ante la virulencia de sus problemas en la voz durante los primeros pasos de la gira ‘35 años’ en Estados Unidos. De este modo, sus fans zaragozanos se quedan con las ganas de disfrutar del directo que tenía previsto en Zaragoza el próximo 3 de septiembre en el marco del festival Vive Latino. Su hueco lo cubrirá, precisamente, Amaral.
Este verano se le ha visto de visita por España, concretamente en la localidad gaditana de El Puerto de Santa María, donde el cantante cuenta con una vivienda. Allí pasa ratos en familia con su esposa Jose y su hija Asia y suele visitar a amigos músicos instalados en la zona, como el productor Paco Loco -en cuyo estudio ha grabado estos días la sobrina de Jose y Enrique, Erin Memento- y el miembro de Jayhawks Gary Louris, entre otros.
Una vida dedicada a la música
Nacido el 11 de agosto de 1967 con el nombre de Enrique Ortiz de Landázuri Izardui, tomó ‘prestado’ su apellido artístico de su amiga de la infancia, la consultora de comunicación Eva Bunbury, antes de que éste empezase a trastear con la batería y el bajo en sus primeros grupos. “Tenía muy claro que iba a ser famoso, y le hacía gracia como sonaba”, reconocía Eva a HERALDO el pasado mes de junio. Tras participar en varios grupos, en 1984 nació Héroes del Silencio, que se convertiría en una de las bandas de rock en español más importantes de todos los tiempos. Su primer disco, ‘El mar no cesa’ (1988), fue uno de los más exitosos del panorama musical. Con el siguiente, ‘Senderos de traición’ (1990), la fama de la banda se extendió por varios países europeos y latinoamericanos.
El documental de Netflix ‘Héroes: Silencio y Rock & roll’, que logró una nominación en la pasada edición de los Goya, narra el ascenso del grupo desde su formación hasta su disolución, doce años después. Enrique Bunbury, Juan Valdivia, Joaquín Cardiel y Pedro Andreu, junto con Gonzalo Valdivia, regresaron a los escenarios para recordar los grandes éxitos de la banda en una puntual gira de conciertos en 2007. 25 años después de su separación, Héroes del Silencio se colaba en los primeros puestos de los vinilos más vendidos en las listas de éxitos españolas.
Respecto a su carrera en solitario, el periodista Pablo Ferrer explica que “en todos estos años, Bunbury ha ido alimentando su versatilidad creativa tocando todos los palos, desde el synth-pop al rock, el tecno, las músicas del mundo, el esquema ‘crooner’ y ese mestizaje que viene presidiendo sus últimos discos en solitario, trabajos siempre cambiantes e inclinados a la sorpresa. En los años venideros se espera una continuidad en esa carrera eterna (ahora más serena) hacia nuevos retos e intereses. De momento, hoy toca soplar unas cuantas velas, disfrutar de ese reposo prolongado tras la vorágine en la que estaba sumido y mirar hacia el futuro con esperanza”.
