ARTE Y PATRIMONIO. OCIO Y CULTURA
La iglesia de Fuentes de Jiloca recupera una vidriera en alabastro de Pietro Morone
El historiador del arte José Luis Cortés la localiza en un taller de restauración en Pamplona la pieza, atribuida al artista italiano del XVI
ZARAGOZA. La iglesia parroquial de Fuentes de Jiloca ha recuperado en las últimas horas una importante obra de arte cuyo paradero se desconocía hasta hace poco. Se trata de la parte superior de una vidriera en alabastro de la segunda mitad del siglo XVI. El destino de la pieza se desconocía, y ha sido un trabajo conjunto entre los historiadores del arte José Luis Cortés, oriundo de la localidad zaragozana, y Carmen Morte, lo que ha conseguido recuperar la obra.
«La iglesia de Fuentes de Jiloca se cerró al culto en abril de 1980 porque no se podía demorar más su restauración –explica José Luis Cortés–. El problema es que las obras se prolongaron más de lo esperado. En la cabecera se conservaba una vidriera de alabastro policromado, que se restauró y regresó a la localidad, y la parte superior de otra».
El carácter traslúcido del alabastro y su abundancia en Aragón ha hecho que a lo largo de los siglos sea utilizado en ventanales de iglesias y ermitas. Incluso en los contratos de obra se habla de ‘vidrieras’ para aludir a este tipo de piezas, aunque no tenían nada de vidrio en ellas.
La lámina de alabastro ahora recuperada tiene una cabeza pintada, y se llevó a restaurar a un taller de Pamplona. El artesano falleció y, como las obras en el templo se prolongaron durante muchos años, al final la pista se acabó perdiendo. José Luis Cortés recibió una fotografía de la pieza y, en colaboración con Carmen Morte, fue tirando del hilo hasta llegar a la familia del restaurador, que facilitó la devolución de la pieza tras encontrarla en su taller. Solo se ha recuperado la lámina en la que está pintada la cabeza de un personaje. «Es San Sebastián, por la iconografía», apunta Cortés.
Y Carmen Morte añade: «En mi opinión, el diseño debe ser de Pietro Morone, por las semejanzas con sus modelos, y anterior a 1577 porque ese es el año en que falleció en Calatayud este pintor italiano, documentado en Aragón en 1551. Morone fue un pintor muy activo en la diócesis de Tarazona, con obras tanto en Aragón como en Navarra y Soria, con trabajos muy destacados en la Comunidad de Calatayud. Están documentadas sus obras en las iglesias parroquiales de Ibdes y de Paracuellos de Jiloca, además de la iglesia de Olvés».
Morte añade que «también trabajó en algún templo zaragozano, como en la capilla de los Arcángeles de la Seo, costeadas por el banquero Gabriel Zaporta. En las puertas que protegen el retablo mayor de Ibdes pintó un Juicio Final inspirado en el de la Capilla Sixtina de Miguel Ángel. Era un buen dibujante y magnífico policromador de obras de escultura. Pintó en muro, en tabla y en lienzo».
El grueso de la iglesia de la Asunción de Fuentes de Jiloca se construyó entre 1574 y 1581, gracias al impulso del arzobispo de Zaragoza Hernando de Aragón, aunque los historiadores llevan el fin de las obras al año 1598. Fue objeto de modificaciones en los siglos XVII y XVIII. Las obras de restauración de principios de los 80 del siglo pasado, según un proyecto del arquitecto Joaquín Soro, consistieron en el refuerzo de la estructura y cimentación, la renovación de la cubierta y el pintado interior.
La vidriera ahora recuperada se presentará este domingo en la localidad zaragozana de Fuentes de Jiloca. El historiador del arte José Luis Cortés, que ya ha recuperado otras importantes obras de arte para la comarca de Calatayud, presentará la obra.
