Saladas de Sástago-Bujaraloz y la Salineta: paisajes de otro mundo muy cerca de casa

El 90% de las saladas pertenece a Sástago, pero también son significativas para sus vecinos. La Salineta, una maravilla a escala de sus hermanas mayores, es de Bujaraloz

La Salineta de Bujaraloz, escenario habitual de sesiones de fotos y filmaciones profesionales.
La Salineta de Bujaraloz, escenario habitual de sesiones de fotos y filmaciones profesionales.
Laura Uranga

Las Saladas de Sástago-Bujaraloz son un tesoro de la provincia de Zaragoza que, si bien se reconoce, no tiene la resonancia de la que gozan otros parajes similares en Aragón. Y es que su singularidad no tiene parangón en España, ni siquiera en Europa occidental; a pesar de los esfuerzos de los dos ayuntamientos y de los repetidos señalamientos que ha efectuado Turismo de Aragón sobre el paraje en foros nacionales y ferias internacionales, el lugar sigue sin tener la repercusión que merece.

Las saladas son un complejo lagunar de carácter endorreico ubicado en una estepa salina, cuyos límites incluyen 26 cubetas lagunares. Este complejo se ubica sobre estratos poco permeables formados por yesos, margas, calizas y lutitas. La presencia de agua ha favorecido los procesos de disolución de los yesos y este factor, junto con la acción erosiva del viento, ha provocado la formación de este complejo.

La mayoría de estas depresiones corresponden a lagunas de elevada salinidad y de carácter temporal efímero, que sólo mantienen agua tras episodios de fuertes precipitaciones, reteniéndola durante cortos periodos de tiempo (semanas) hasta que se termina de evaporar, dejando en el fondo de las cubetas las típicas costras salinas; sólo 16 de las lagunas suelen inundarse de forma estacional, reteniendo el agua algo más de tiempo (meses). Eso provoca que la visión de esa costra salina sea aún más mágica: grandes espacios que brillan como espejos quebrados al sol.

Flora y fauna

En las Saladas se han identificado hasta 31 endemismos ibéricos de flora vascular, entre los que destacan la Limonium stenophyllum o L. catalaunicum. También es reseñable la presencia de musgos y hepáticas adaptados a este tipo de ambientes salinos extremos.

En cuanto a la fauna, abunda la invertebrada de vida efímera que se desarrolla en las saladas en los breves periodos en los que mantienen agua, con especies únicas en el mundo como el crustáceo acuático Candelacypris aragonica, y otras tan raras como el anostráceo Branchynectella media y el ostrácodo Heterocypris barbara. Entre la fauna vertebrada, destacan la Lagartija colirroja, la avutarda, el sisón o la alondra de Dupont.

La Salineta, muy cercana a Bujaraloz (aunque hay que buscarla, porque está detrás del polígono industrial) ha sido escenario de rodajes y sesiones fotográficas, como la protagonizada para Vogue Portugal por la modelo Maja Zimnoch el año pasado, que se puso delante de la lente del fotógrafo Javier Castán. También rodó allá Paula Ortiz, en este caso un vídeo de Vetusta Morla. Se trata de un lugar con un aura muy especial: el mismo hecho de caminar sobre la arena crujiente y romper con las suelas los cristales de sal ya impresiona lo suyo.

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