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Lita Cabellut: "El Instituto Cervantes es el guardaespaldas de la cultura española"
La pintora aragonesa, María Moliner y otras siete creadoras ingresan con su legado en la Caja de Letras del centro que dirige Luis García Montero
Las aragonesas Lita Cabellut, artista multidisciplinar nacida en Sariñena, y María Moliner, filóloga y autora del ‘Diccionario de uso del español’, figuran entre las nueve mujeres que ayer ofrecían parte de su legado a la Caja de las Letras del Instituto Cervantes. En el caso de María Moliner, fallecida en 1981, fue a través de su familia. La entrega tuvo lugar en la sede del centro en Madrid, el mismo 8M, ante la vicepresidenta de Gobierno Nadia Calviño, el director del Cervantes Luis García Montero y otras autoridades.
La Caja de Letras del Cervantes recibió obras, objetos y recuerdos especiales de nueve creadoras de diversas disciplinas. Son Cristina Iglesias, escultora y grabadora; Gioconda Belli, novelista y poeta nicaragüense; Laura Restrepo, escritora colombiana; Aitana Sánchez-Gijón, actriz; María Vallet-Regí, investigadora y profesora; Carmen Linares, cantaora, y Maruja Torres, periodista y escritora. Todas ellas vivas, salvo María Moliner, que nació en Paniza en 1900 y murió en Madrid en 1991; fue su nieta Genoveva Pitarch quien entregó una primera edición de su famoso diccionario, que recibió elogios por doquier, entre ellos de Gabriel García Márquez en un artículo que se titulaba ‘La mujer que escribió un diccionario’.
El Instituto Cervantes explicaba el pasado viernes las razones de estos legados de nueve mujeres. Dijo que son “figuras relevantes en diferentes áreas, disciplinas y ámbitos a los que se dedican y el acto se ha organizado como símbolo del apoyo activo de la institución a la igualdad de derechos entre hombres y mujeres”.
Lita Cabellut estaba muy preocupada por lo que está pasando en Ucrania y por el clima de incertidumbre que se vive en Europa. Pensó que no podría asistir al acto; finalmente pudo hacerlo y estaba radiante. Ella ha necesitado una caja especial, más grande, porque ha cedido la edición de Artika de ‘Bodas de sangre’, de gran formato, y además ha donado las botas de trabajo, todas pintarrajeadas o llenas de pintura, que usó durante esa obra ambiciosa que ha cristalizado en un libro de artista de 120 páginas y en cuadros grandes, dispuestos ya para ser expuestos.
Como ha recordado desde hace años, Federico García Lorca, con Camarón, es uno de sus grandes dioses, y otro de sus sueños, al que le da mil vueltas, es ilustrar con piezas de gran formato el ‘Romancero gitano’ del poeta granadino. “Para mí ‘Bodas de sangre’ es un testimonio, una denuncia, una belleza profunda, una verdad real, una pasión teñida en amor. Lorca es un gran maestro, preocupándose y queriendo a la humanidad -decía a HERALDO- y el ‘Romancero’ una obra en marcha, está en mi cabeza y más tarde o más temprano lo haré”.
Tan racial, tan gitana, tan poseída por la pasión y el arte, Lita estaba emocionada. “El Cervantes es el guardaespaldas de la cultura española. Este acto es un orgullo para mí, pero sobre todo me produce una alegría muy muy profunda ver y sentir que el Arte se quiera conservar como testimonio de todos aquellos que lo vemos como un órgano vital e imprescindible de nuestra sociedad”, añadió. "Estás cajas están llenas de sueños, de la gente que se atreve a soñar y eso es algo tan importante en estos momentos históricos. No hay que olvidar la relevancia del arte ahora que estamos viviendo todo esto", dijo Cabellut, y dedicó el acto a "todas las mujeres de Ucrania".
Lita Cabellut, ante Nadia Calviño y García Montero, así como las compañeras que cedían sus objetos al Cervantes, dijo que el Instituto “era el guardaespaldas de la cultura española”. Para Heraldo.es valoró qué significa para ella un día como el 8M, y más en tiempos de guerra. “Es más especial que nunca, porque dentro de la catástrofe que está pasando el mundo en estos momentos es cuando más necesitamos a la mujer con su fuerza, su sensibilidad y su arte para impedir que se apague la luz en el mundo”.
También reflexionó en un día tan señalado acerca de lo que le falta a la mujer, si aún le faltase algo. “A la mujer le falta que se reconozca en muchos campos su lugar. A la mujer no le falta nada. Lo que falta es a la sociedad aceptar a la mujer como un ser igual, con todas sus fuerzas y sus debilidades. A la humanidad le falta reconocer ese respeto al ser humano”.
