Farruquito, en plena forma

Farruquito, el reconocido bailaor de flamenco, estrenó su última obra ‘Íntimo’ el pasado 18 de octubre en el Teatro Principal. El artista siempre demuestra su apego a Zaragoza quizá influenciado por el cariño con que el que siempre se le recibe aquí y concretamente en el mencionado teatro.

‘Íntimo’ es un recorrido por diferentes palos del flamenco en el que se hace acompañar por tres cantaores, guitarra y percusión. Con una escenografía minimalista, variando solamente luces y focos, el espectáculo le va a Farruquito como anillo al dedo. Desde el principio, el bailaor llenó la escena de calor con su taconeo y su ritmo y el público respondió inmediatamente entusiasmado, desde el primer martinete, siguiendo con alegrías, fandangos y muchas bulerías, que son tan ‘suyas’. Sus pies se iban calentando más y más y ofrecieron momentos magníficos gracias al sonido de esos zapateados, repletos de fuerza y energía.

Se nota que el intérprete está muy a gusto haciéndose valer y luciendo su forma, que es estupenda. Así, en cada pequeña pausa que provocaba, sonaban las ovaciones. Y, desde luego, bien merecidas. En la soleá por bulerías, se conjuntaron por primera vez las voces de María Vizcárraga, Ezequiel Montoya e Ismael de la Rosa. Encajaron de maravilla. Se adaptaron las tres tan bien que, a pesar de ser reputados cantaores a título individual, todavía resultan mejores los tres juntos. Es un verdadero placer escucharles junto con dos grandes músicos del nivel de Antonio Santiago a la guitarra y Paco Vega a la percusión.

Después de un bonito final y con un atractivo cambio de luces, el grupo fue desapareciendo suavemente del escenario. Pero volvieron para decir adios con su alegría y la respuesta apasionada del público. Y Farruquito se despidió, como siempre, con palabras amorosas dedicadas a Zaragoza.