terrazas en Zaragoza
A la fresca: Asquas, espetos y brasas en las afueras de San Juan de Mozarrifar
Juan Bas, uno de los propietarios de la finca de bodas Torre del Pino, ha montado esta terraza para hacer frente a la pandemia.
La finca Torre del Pino era, hasta que llegó la pandemia, uno de los principales escenarios para la celebración de bodas en las afueras de Zaragoza. Juan Bas, uno de sus propietarios, recuerda ese tiempo con nostalgia pero sin caer en el desánimo.
Aquellas cenizas dejaron sus rescoldos. No le quedó otra que buscar una alternativa y ahí surgió la figura de su compañero y socio José Mármol. Juntos crearon Asquas (www.asquas.es), un proyecto en el que se definen como especialistas en espetos y brasas.
“Justo al lado de la finca hay una explanada que está sin utilizar –comenta Juan Bas– y a mi compañero se le ocurrió que podía ser el lugar perfecto para montar una terraza de verano donde disfrutar de la gastronomía y de unas puestas de sol increíbles”. Le pidieron permiso al resto de los propietarios de Torre del Pino, resolvieron los trámites administrativos y el pasado mes de julio echó a andar este proyecto hostelero.
¿Qué es y en qué consiste? De una forma gráfica podría describirse como un establecimiento a medio camino entre una terraza de verano de pueblo y un chiringuito de playa, pero en las afueras de San Juan de Mozarrífar. El comedor al aire libre se encuentra prácticamente en medio del campo. Hay una pequeña zona cubierta y unas mesas protegidas por algunos árboles. Eso es todo.
Desde cualquier punto del recinto se contempla la herramienta de cocina que da sentido a esta curiosa brasería/espetería, una magnífica barbacoa de cuyo manejo se encarga José Mármol. “El diseño es de un herrero de Alagón y tuvimos la enorme suerte de poder comprarla –comenta–, es una pieza única que cuenta con una parrilla motorizada para poner las carnes a distintas alturas y con cajones que hacen las veces de horno para asar patatas, boniato o pescados”.
Por supuesto, los espetos forman parte de la propuesta de Asquas. Lo habitual es espetar sardinas, tal y como se hace en Málaga y en la costa granadina, pero en esta terraza de San Juan de Mozarrífar se ofrece la posibilidad de elaborar otros productos del mar como pulpo, dorada, rape o lubina.
Las carnes también encuentran acomodo. En función del tamaño, se monta el espeto en la tierra sobre las brasas o se utilizan otras técnicas. Juan y José ya han probado con ternasco de Aragón, conejo o un lechón de siete kilos. “Eso sí, estos asados los hacemos bajo pedido, ya que hay que tener en cuenta que son elaboraciones que requieren entre cuatro y cinco horas”, explican.
Sobre la parrilla tradicional preparan el chuletón clásico y cortes más especiales. Entre ellos, el T-bone (vaca de raza pirenaica en un corte en el que se aprovecha el solomillo y el lomo) o tomahowk (un tipo de corte americano de la carne para compartir). La carta incluye otros clásicos de la barbacoa como churrasco con patatas asadas, parrillada de embutidos o chuletillas de cordero.
Para abrir boca mientras se trabajan estas especialidades hay recetas como tartar de ahumados, escalibada y ensaladilla rusa. Y entre los entrantes, las opciones son ensalada aragonesa, tomate rosa con ventresca de atún o puntas de espárragos con salmón.
Este proyecto nació con vocación de dar servicio al aire libre mientras la climatología lo permita, pero ahora mismo la intención de sus responsables es trabajar durante todo el año. Para ello se está habilitando un comedor a cubierto que empezará a funcionar en el mes de octubre.
De momento, todavía se puede disfrutar a la intemperie de jueves a domingo. Por cierto, hay que insistir en las puestas de sol, que poco tienen que envidiar a escenarios con mucha fama. Y otro detalle interesante es el de la iluminación. Las luces funcionan con placas solares y se empiezan a encender a medida que cae la noche.
