excursiones veraniegas

Naval: baños de sal y enoturismo

Las instalaciones del Salinar permiten disfrutar de una jornada de relajación que se puede empezar o terminar con una visita a la Bodega Otto Bestué.

Una de las piscinas del Salinar de Naval.
Una de las piscinas del Salinar de Naval.
S. N.

Desde mediados del mes de junio está abierto el Salinar de Rolda, en Naval (Huesca), con unas renovadas instalaciones en las que la sociedad local que gestiona el complejo –participada por el Ayuntamiento, la parroquia y los vecinos– acaba de invertir 100.000 euros para adaptarlas a la demanda de los clientes y a las nuevas condiciones derivadas de la pandemia.

El Salinar dispone de cinco piscinas, tres de ellas de poca profundidad y adaptadas para todo tipo de público. Las otras dos tienen dos metros de profundidad aunque es casi imposible sumergirse hasta el fondo por la densidad de la sal en el agua, procedente del manantial que se viene aprovechando desde hace siglos para la producción de sal de mesa.

Los gestores de las instalaciones recomiendan disfrutar de un refrescante baño en alguna de las piscinas, en las que se flota sin ningún esfuerzo, por espacio máximo de 20 minutos. Después, hay que secarse al sol y conforme se evapora el agua la sal se queda en la piel. Una suave frotación sobre ella actúa como exfoliante, dejando la piel suave y tersa.

El Salinar dispone de unas completas instalaciones que posibilitan pasar toda una jornada relajante. La hamaca se incluye con la entrada y además se alquilan jaimas con mesas interiores independientes. También está la posibilidad de alquilar una mesa de picnic para un máximo de seis personas en la zona destinada a este fin. El pase para todo el día cuesta 10 euros.

Y, por supuesto, la zona de bar incluye servicio de restaurante, con un menú que se sirve entre las 13.00 y las 16.00. Se puede elegir entre cinco primeros platos y cinco segundos e incluye postre y bebida, por 18 euros.

Además de este salinar, Naval ofrece otros atractivos turísticos que se pueden disfrutar con las visitas guiadas que salen desde la oficina de turismo, en la Plaza Mayor. El recorrido incluye los alfolíes para el almacenamiento de la sal, que datan del siglo XIII, el antiguo lavadero (siglo XIX) y el Centro de Interpretación de la Alfarería, una actividad con larga tradición en Naval. También se visita la Colegiata de Santa María, del siglo XVI, y los restos del castillo feudal.

Naval es la población más importante de esta parte norte de la comarca de Somontano, cerca de la frontera con Sobrarbe, en la que hay numerosos atractivos gastronómicos. En el propio salinar se vende sal de mesa ‘gourmet’ y también sales de baño.

Cerca, en El Grado, hay restaurantes con un buen nivel gastronómico, como por ejemplo Tres Caminos, donde es posible también hospedarse en su hotel o apartahotel. Hace una cocina tradicional modernizada con productos de la zona, como la trucha o el esturión del Cinca.

Un poco más abajo, en dirección a Barbastro, está el pueblo de Enate, donde se ubica la Bodega Otto Bestué, adscrita a la D. O. Somontano, que elabora unos excelentes vinos y que se puede visitar, incluso con desayuno incluido, con cita previa.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión