Calanda se convierte en escenario de cine con el rodaje de ‘Benito Pérez Buñuel’

Un documental grabado en parte en la localidad turolense analiza las conexiones entre Pérez Galdos y Luis Buñuel.

En primer término, la productora Marta de Santa Ana y el director Luis Roca
En primer término, la productora Marta de Santa Ana y el director Luis Roca
Beatriz Severino/La Comarca

Calanda ha sido en los últimos seis días escenario de cine con el rodaje de ‘Benito Pérez Buñuel’, una película documental con proyección internacional e impulsada desde las islas Canarias que ahonda en las conexiones entre el escritor y el cineasta.

Esta película está producida por Marta de Santa Ana y dirigida por Luis Roca, dos canarios apasionados de ambas figuras, de la literatura y el cine que decidieron contar una historia en la que no se había profundizado. Luis Buñuel, en conversaciones con Max Aub, dijo que la única influencia que reconocería sobre él sería la de Benito Pérez Galdós. Esta afirmación fue el hilo del que tirar para dar forma a esta producción cuyo rodaje arrancó en Gran Canaria en 2020, en el llamado Año Galdós por el centenario de su muerte, coincidiendo con el 120 aniversario del nacimiento del calandino. Han rodado en las islas, en Los Ángeles y México antes de llegar a Calanda, localidad de la que ya se despiden para poner rumbo al próximo destino.

La declaración del estado de alarma impidió rodar en la primavera de 2020, pero este ya debía ser el año de Calanda. La situación sigue siendo excepcional pero no ha acallado el latir de la tierra bajoaragonesa cuna de Luis Buñuel. Los tambores y bombos sonaron y, aunque no con la plaza a rebosar, sí desde las casas, balcones y cocheras y con el sentimiento intacto. "Tenemos un documento único, nos parecía interesante rodar esta Semana Santa atípica", dijo el director. Además, grabaron en el Centro Buñuel o en la vivienda de la familia entre otros enclaves.

En el documental se entremezclan las voces expertas sobre ambas figuras con minutos de animación. "Buñuel y Galdós hablaban con acento aragonés y canario y esto se respetará, tiene que ser así y para el doblaje de la parte de animación contamos con actores aragoneses y canarios", adelantó De Santa Ana. A nivel institucional cuentan con los apoyos del Gobierno de Canarias, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria y el Cabildo de Gran Canaria, además de la Radio Televisión Canaria. A su paso por Aragón, el Ayuntamiento de Calanda junto al Centro Buñuel y la Diputación Provincial de Teruel son las entidades que de momento han sumado su apoyo.

Equipo canario y aragonés

La filosofía de la productora es contar con personal autóctono del lugar de rodaje. El equipo calandino lo han formado 14 personas entre canarios y aragoneses y junto a director y productora están Santiago Torres como director de fotografía; Fabián Yanes en sonido, Jorge Rojas, como técnico de imagen digital y la foquista ha sido la aragonesa y también realizadora Sandra Gómez. Entre los aragoneses se encuentran seis estudiantes de los centros CPA Salduie y CPIFP Los Enlaces. Nil Ibáñez, David Martínez, Delia Martín, Sergio Prades, Violeta Ferrer y Diana Zalacaín, se distribuyen entre producción, realización e iluminación ya que "todos pasan por todos los departamentos". El ayudante de dirección es Guillermo Chapa, realizador turolense que en otoño fue uno de los seleccionados para las Residencias de la Academia de Cine en Madrid. La zaragozana Camino Ivars, que cuenta con una dilatada experiencia en el audiovisual aragonés y ya ha trabajado en Calanda, es la jefa de producción. "Se tenía claro que se quería contar con estudiantes porque es un año complicado en el que ni siquiera nosotros podemos trabajar tanto como nos gustaría, así que para ellos, es peor porque no salen tantas oportunidades para realizar prácticas", dijo.

El rodaje ha debido adaptarse a los tiempos covid y eso ha conllevado una inversión extra y necesaria para proveer de todas las medidas de seguridad. También reducir grupos, algo que por otro lado ha supuesto una ventaja de cara al aprendizaje. "Para nosotros, un rodaje como este documental es una oportunidad porque nos permite tocar algo de todos los departamentos y además, se ha creado muy buen ambiente", dijo Violeta Ferrer, una de las alumnas. "Siempre con supervisión pero les damos toda la responsabilidad posible, son parte muy importante", concluyó De Santa Ana.

Beatriz Severino

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