Samsung Galaxy A 2021: A52, A52 5G y A72, todos los modelos, características y precios

Tras años en el trono del segmento ultrapremium de la telefonía móvil, con 'smartphones' tan exclusivos como inaccesibles para muchos usuarios y que superaban los 1.000 euros sin rubor, Samsung se lanza en este 2021 con su habitual descaro a la caza del usuario joven y con menos recursos económicos, con una gama media renovada que promete cubrir todas las necesidades sin descuidar ninguna de las claves de un buen teléfono.

Los Samsung Galaxy A de 2021 se han renovado (por el momento) con tres modelos muy similares -tanto que incluso en la mano cuesta a veces distinguirlos-, pero que también tienen detalles que los hacen únicos frente a sus mellizos. Se trata del Samsung Galaxy A52, el Galaxy A52 5G y el Galaxy A72.

Hablemos primero de las cosas que los unen. El diseño de los tres terminales es muy similar. De hecho, en el caso del A52 y el A52 5G es calcado, mientras que el A72 es ligeramente más alto y pesado, porque, como veremos más adelante, tiene una pantalla mayor y más batería. Los tres ases de Samsung están fabricados en un plástico pulido de tacto agradable, que elude bien las huellas y que promete convertirlos en teléfonos más resistentes que sus hermanos mayores con traseras de cristal.

El módulo de cámaras (son 4 las lentes) sobresale, pero poco. Con un diseño suavizado que junto a los tonos pastel de este año le dan un aire juvenil y desenfadado que apuntan claramente a un segmento de edad.

El frontal es todopantalla, con márgenes reducidos y poca barbilla, un agujero pequeñito para la cámara de selfis y un diseño plano , pero redondeado en los bordes.

Los tres terminales han mejorado en cuanto a sonido, con unos altavoces estéreo con Dolby Atmos, que son potentes, tienen graves profundos y se escuchan realmente bien, incluso a un volumen elevado. El más grande de los terminales tiene un poquito más de potencia sonora, pero la diferencia es muy pequeña.

Los tres cuentan con puerto USB-C y los tres se cargan a un máximo de 25 W (vuelve a quedarse atrás Samsung en este aspecto frente a la competencia), pero solo el más grande incluye un cargador de esta potencia en la caja, los dos A52 tienen uno de 15 W y el usuario tendrá que pasar por caja si quiere aprovechar las cualidades de su 'smartphone' en su plenitud.

Ninguno cuenta con carga inalámbrica ni, por supuesto, carga inalámbrica inversa, lo que sí que tienen es un 'slot' para una tarjeta Micro SD que puede ser de hasta 1 TB, para ampliar los 128 o 256 GB de almacenamiento interno de fábrica. Las opciones de compra se completan con modelos de 4 , 6 y 8 GB de RAM, que mejorarán la fluidez y el rendimiento, asegurando un mejor funcionamiento, sobre todo en el futuro.

Un futuro, por cierto, asegurado en cuanto a a actualizaciones por la nueva política de Samsung con Android que promete hasta cuatro años, por lo que el usuario debería estar cubierto, al menos, hasta 2025.

Los tres terminales son resistentes al agua IP67 (1 metro de agua durante media hora) y tienen un sensor de huellas bajo la pantalla para desbloquearlo.

Las diferencias, pequeñas pero decisivas

El Sasmung Galaxy A52 4G es el más sencillo y barato de los tres, lo que no significa que no sea un teléfono completo. Cuenta con una pantalla de 6,5 pulgadas FHD con una tasa de refresco de 90 Hz. La cuádruple cámara trasera con un sensor principal de 64 Mpx, un gran angular de 12 y un macro y un sensor de profundidad de 5 Mpx; mientras que la cámara para sefis -que comparte con todos sus hermanos- es de 32 Mpx.

En cuanto al procesador, cuenta con un Snapdragon 720G, un chip lanzado en enero del año pasado que ha demostrado ser solvente y fluido, capaz de llevar a cabo cualquier tarea e incluso reproducir juegos exigentes sin muchos problemas.

La batería es de 4.500 Mah, una cifra que le permite contener el peso en 189 gramos y que, según la campaña de márquetin de Samsung, le lleva a pasar dos días completos sin pasar por el enchufe.

Por su parte, el Galaxy A52 5G muestra su principal diferencia en el apellido. Con un procesador Snapdragon 250G suma la conectividad 5G al conjunto y asegura un futuro con conexiones más rápidas a internet que su hermano pequeño.

Pero las diferencias no se quedan ahí, ya que el A52 5G tiene también mejor pantalla, con una tasa de refresco de 120 Hz. Falta por ver si esta virtudes lo penalizan en el consumo de la batería, ya que mantiene la cifra en el depósito de miliamperios de 4.500 y la carga rápida de 25 W.

El hermano mayor que mejora, pero solo en algunos aspectos

El Samsung Galaxy A72 es, como su propio nombre indica, el más diferente de los tres. Su pantalla de 6,7 pulgadas es más grande, lo cual hace que sea también más pesado (supero los 200 gramos) y un poco más incómodo en la mano. Mantiene los 90 Hz y la conectividad se queda en 4G con el mismo procesador que el A52 simplón.

Donde si que mejora es en las cámaras y la batería. En lo primero, sustituyendo el sensor de desenfoque por un teleobjetivo de tres aumentos que mejora, y mucho, las fotos lejanas. En lo segundo, alcanzando los 5.000 miliamperios que seguramente lo convertirán en el campeón en batería de los tres hermanos de 2021.

En definitiva, Samsung parece bien armada para competir en la gama media, pero lo cierto es que sus rivales no se lo van a poner fácil. El usuario que busque la marca y sus garantías está de enhorabuena, porque la familia Galaxy A nunca había sido tan completa en especificaciones, sin embargo habrá usuarios que prefieran los números grandilocuentes de los Redmi de Xiaomi, que han llevado recientemente los 108 Mpx a terminales por debajo de 300 euros.

La batalla de la gama media está servida y finalmente será el usuario el que decida el vencedor si es capaz de tomar una difícil decisión incluso dentro de la propia familia Galaxy.