El ‘Cuaderno de vacaciones para adultos’ vuelve mañana a las librerías

El actor y humorista Berto Romero, fan confeso de estos cuadernos, los define como “los Vacaciones Santillana para adultos”. Se trata de las revistas que la editorial Blackie Books publica cada verano y en el que quienes ya peinan canas encuentran sopas de letras, pasatiempos, relatos, test y laberintos, con una estética y un fondo muy propio de la cultura de los años 80 y 90. Mañana sale a la venta el número 9 de estos cuadernos que sus lectores esperan como agua de mayo (bueno, de junio) pues en cada nuevo número han ido subiendo poco a poco las ventas y son ya 150.000 los ejemplares que despachan cada verano.

Los creadores son el periodista y campeón del concurso televisivo ‘Saber y ganar’, Daniel López Valle, y el reputado ilustrador Cristóbal Fortúnez. Y la promoción del cuaderno promete “más de 120 horas de insólito aprendizaje” y juegos de lógica “que no sirven para pasar el tiempo, sino para aprovecharlo, en vacaciones y más allá de ellas”.

Pero, ¿qué tipo de ejercicios se esconden en sus páginas? Cogiendo ejemplos de revistas anteriores se propone, como botón de muestra, identificar a personajes icónicos de películas solo por la ropa que visten en sus más conocidas escenas. También invitan a anotar la letra de canciones de verano de la que apenas conocemos los estribillos. ¿Más juegos? Se echa mano del popular ‘Fun with flags’ de Sheldon Cooper en su ‘Big Bang Theory’ para adivinar las enseñas de ciertos países o se traza un mapamundi de los horrores para ver quién sabe situar a Nessie, Drácula, Godilla o el Kraken en su país de origen.

La música, las series, las ‘celebrities’ y el cine son los aspectos en los que más abundan los pasatiempos, con divertidas caricaturas de todas las Kardashians habidas y por haber o con recortables de Prince, Beyoncé, Amy Winehouse o Agnus Young. No obstante, el deporte está también más que presente (y más este año con el tirón del documental de Michael Jordan) y la política siempre es un filón para explotar: bien sea con las frases más enigmáticas de Rajoy o con el imposible color de tez de Donald Trump.

Se percibe en cada juego que los autores bordean la cultura ‘millennial’ (son nacidos en 1982 y 1980) y ambos confiesan que su propósito no es otro sino el de “desintoxicar el cerebro”. Recuerdan que en su infancia había veranos en los que preferían quedarse en casa haciendo los cuadernos de vacaciones antes de ir a la piscina con los amigos y… de aquellos polvos, estos lodos. “Los cuadernos, no obstante, son aptos para playa y montaña”, aclaran desde la editorial, al tiempo de que informan que son unas cien páginas de publicación a todo color y que su precio es de 12,90 euros. Cada nueva edición, por aquello de los ávidos coleccionistas, suele agotarse en las librerías y quioscos, pero en la web despachan número viejos que aún tienen en ‘stock’.

En la portada del cuaderno de este año aparece dibujada una joven tomando la fresca en un balcón y no pasa desapercibida su mascarilla junto al escritorio. Sorprende lo muy pegados a la actualidad que están estos cuadernos y, no en vano, el pasado mes de abril la editorial catalana lanzó una edición especial con motivo del confinamiento. Ese ejemplar especial para hacer más llevadero el encierro era gratuito y descargable, siempre y cuando uno se diera de alta en la ‘newsletter’ de la editorial.

Algún relato, crucigramas y sopas de letras forman parte del volumen 9 de estas publicaciones que se venden como “la oportunidad de apagar el móvil, coger un lápiz y disfrutar poniendo en jaque al cerebro. Como dicen sus creadores “no es un cuaderno de deberes porque nadie te obliga a hacerlo” y, por cierto, “funciona con energía solar, por eso se saca en verano”, añaden. Mientras tanto, van ultimando una galería de guitarras para identificar si pertenecen a los músicos de Queen, Kiss, The Clash o los Ramones.

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