Principal: el teatro sin teatro

ZARAGOZA OCULTA. TEATRO PRINCIPAL / 28-09-2013 / FOTO: GUILLERMO MESTRE [[[HA ARCHIVO]]]
El Teatro Principal de Zaragoza, asomado al Coso
Guillermo Mestre

El anuncio de la presentación de un libro de la antes política y últimamente tertuliana Cristina Seguí se ha esfumado de la web del Teatro Principal, porque la movilización social y seguidamente política iba a más. Pero la fundadora de Vox ya se lleva de la Administración municipal zaragozana el regalo de una apreciable promoción (vía agitación, como a ella le gusta) para su ‘Manual para defenderse de una feminazi’, que así se llama el contenedor de papel en el que vierte sus deposiciones.

El Principal, con su anterior gerencia, se había enfocado hacia una programación de artes escénicas atenta a la excelencia y lo contemporáneo que estaba ahorrando muchos viajes a a Madrid a los aficionados. Aquello iba cogiendo ritmo, por aquí pasaban varios de los montajes más interesantes del momento, y la agenda se completaba con algunas producciones locales ambiciosas y programas como el que estaba favoreciendo el retorno a la ciudad de coreógrafos y bailarines formados en ella. Esta forma de hacer no gustaba a todos y no siempre (aunque sí bastante a menudo) era respaldada por públicos masivos.

El Patronato de Artes Escénicas del actual gobierno de la ciudad ha roto con todo aquello y está funcionando con el éxito de taquilla como primer criterio, sin intentar equilibrar lo popular con el contrapeso que da sentido a su existencia: el de llegar donde no lo hace el sector privado. Basta con echar un vistazo a lo programado últimamente o a lo que se viene las próximas semanas al Principal para comprobar que teatro verdadero hay poco, aunque abunden los enredos, el petardeo, las visitas de personajes televisivos, las variedades, las galas...  El incluso cabía el ‘show’  de Seguí, a quien se le puede discutir casi todo, pero no su tirón.

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