El rapero de nombre artístico Lírico, de 42 años, miembro fundador del popular grupo musical aragonés Violadores del Verso, que lleva en prisión provisional desde el mes de agosto por la agresión a una joven de 27 años en Alcocéber (Castellón), ha estado unas semanas en un centro hospitalario para ser estabilizado y someterlo a una evaluación psiquiátrica, pero ayer regresó al centro penitenciario Castellón I, según fuentes penitenciarias.

En su retorno a la prisión de Castellón I, David Gilaberte ha entrado dentro del programa de protección de suicidios que lleva en marcha la Secretaría General de Instituciones Penitenciarias para evitar los riesgos para un preso. Estará siempre acompañado por un interno tanto  dentro como fuera de la celda, que compartirán. 

Fuentes penitenciarias señalaron que en el centro hospitalario de la capital castellonense ha estado atendido por un psiquiatra, después de haber protagonizado en el mes de septiembre una agresión a un compañero de la celda cuando los funcionarios procedían a cerrar las de los internos que tienen destino de limpieza. Este suceso, que era el segundo protagonizado por el cantante aragonés con sus compañeros, le llevó al módulo de aislamiento varias semanas.

Asimismo, la atención del psiquiatra se va a trasladar ahora al interior de la prisión de Castellón I para todos los presos que la necesiten, no solo para David Gilaberte, según fuentes penitenciarias, como consecuencia de los últimos episodios protagonizados por el cantante aragonés.