ocio y cultura

El historiador Pedro Gutiérrez desmenuza los secretos de un ‘Aragón de cine’

Recuerda directores, películas y rodajes, la visita de Walt Disney, el origen turolense de la actriz María Montez, un jota que bailan Terence Hill y Henry Fonda en un libro de más de 600 páginas

Meller y Chaplin.
Charles Chaplin y Raquel Meller estuvieron a punto de colaborar en 'Luces de la ciudad'.
Heraldo/Círculo Rojo.

Se ha dicho muchas veces que “Aragón es tierra de cine”, y quizá algunas menos que “Aragón es una tierra en el cine". Los dos conceptos se alían en el monumental volumen ‘Aragón de cine’, de más de 600 páginas, del historiador Pedro Gutiérrez Recacha, que publica Círculo Rojo. El autor intenta mezclar la historia de los directores, de las productoras y de los actores, de los rodajes y los escenarios, con algunos hitos - ‘Los Amantes de Teruel’, la presencia del baturrismo, la leyenda de la ‘Dolores’ o las versiones de ‘Nobleza baturra’- y un sabroso y variado anecdotario.

El autor se acerca en capítulos más o menos extensos a figuras como Segundo de Chomón, Luis Buñuel, Adolfo Aznar (“¿Era gafe este cineasta?”), José Luis Borau (es curioso: su película ‘Tata mía’ parece tener algo de homenaje a ‘Nobleza baturra’ con Imperio Argentina), José María Forqué, Carlos Saura, raros y experimentales como Antonio Maenza y Antonio Artero, y por supuesto Florián Rey, estudiado en varios capítulos. Aquí se recuerda su intento de hacer western sobre el Coyote, el personaje creado por José Mallorquí; no fue posible, aunque sí lo hizo Joaquín Romero Marchent.

El gran director italiano Sergio Leone fue el productor de ‘Mi nombre es ninguno’, dirigida por Tonino Valerii y rodada en Almería En una secuencia, los dos intérpretes principales Henry Fonda y Terence Hill se marcan una jota.

Entre los actores, se recuerdan a Ino Alcubierre, las hermanas Pili y Mili, Antonio Garisa, Fernando Sancho (que inspiró una canción del músico jamaicano Dillinger y era conocido por ‘Carioco’ por su pasión por la música brasileña), Paco Martínez Soria, que cuenta con un extenso retrato y capítulo monográfico dedicado a ‘La ciudad no es para mí’ (de él dice Pedro Gutiérrez: “es hablar de un mito, de un auténtico fenómeno sociológico, de una figura que ha arraigado en la memoria colectiva, en el ADN aragonés”), Fernando Esteso o, entre otros, Raquel Meller, que se citó con Charles Chaplin.

El gran maestro del humor quiso que interpretase a la heroína de ‘Luces de la ciudad’ y que cantase en la pieza, pero la turiasonense no aceptó. Chaplin incorporó ‘La violetera’ sin autorización, y el autor José Padilla litigó y litigó para que se le reconociesen sus derechos. En la prensa se publicó una foto de Meller y Chaplin y se decía que “los dos famosos artistas impresionarán una película basada en la vida de Napoleón Bonaparte”.

Curiosidades hay muchas. Steve Spielberg incorporó el Instituto Tecnológico de Aragón en su proyecto, y eso dio mucho que hablar. Walt Disney pasó de incógnito por Zaragoza, y su único rastro fue su firma en el libro de visitas del Gran Hotel el 9 de octubre de 1957 y y una confesioón al periodista y caricaturista Manuel del Arco. A la vez, el actor y doblador Pablo Pablitos, nacido en El Gancho, dio voz a algunos personajes del creador norteamericano como Pepito Grillo, el ratón Timoteo y el conejito Tambor. Palitos sentía fervor por el Pilar; años después su hija diría: “Siempre que Pablo Palitos venía a Zaragoza iba a visitar a la Virgen del Pilar”.

El gran José Isbert, o Pepe Isbert, actor de ‘Bienvenido Mr. Marshall’, ‘Calabuch’ o ‘El verdugo’, entre muchos otros títulos, fue recordado por su nieto Carlos Isbert, que dijo: “Recuerdo a mi abuelo pintando en la aldea, haciendo cuadros de la Virgen del Pilar en azulejos”. Su hija María Isbert, que trabajó en Aragón en varias ocasiones, “fue enterrada portando una medalla” de la santa.

Si de fe se trata, John Wayne, tras ser operado de cáncer, recibió un regalo aragonés: “Una mujer que prefiere mantenerse en el anonimato le dio una estampa de Josemaría Escrivá de Balagurer. A Duke, comprensiblemente, le cayó bien desde el principio”.

María Montez.
María Montez descendía, por parte de su abuelo paterno, de Estercuel (Teruel).
Heraldo/Círculo Rojo.

Otro detalle, María Montez, la gran actriz que falleció a los 39 años, tenía antecedentes turolenses: si abuelo paterno era de Estercuel (Teruel), como probó la investigadora María Victoria Hernández. Eso sí, la película que más sigue dando que hablar de las que se rodaron aquí es ‘Salomón y la reina de Saba’, en cuyo rodaje pereció Tyrone Power, tras un lance de espadas que vivió en Madrid con George Sanders. Power, que compartía protagonismo con Gina Lollobrigida, fue reemplazado por Yul Brynner, que nunca estuvo en Zaragoza.

El autor encuentra similitudes entre Goya, Agustina de Aragón y ‘Lo que el viento se llevó’. Dice que la estampa ‘¡Qué valor!’, de Goya, que encarna a la heroína, parece «muy en consonancia con el famosísimo monólogo pronunciado por la actriz Vivien Leigh en el papel de Escarlata O’Hara».

Pablo Calvo en el Pilar.
Pablito Calvo en el Pilar, en la película 'Alerta en el cielo', que abordaba también la Base Aérea.
Heraldo/Círculo Rojo.

El autor ha trabajado mucho, ha rastreado más, ha leído muchas monografías, ha seguido las publicaciones de prensa, especialmente HERALDO, halla detalles pintorescos e inesperados, e incurre en el viejo error, ya solventado por Agustín Sánchez Vidal, de que el rodaje de ‘Salida de misa de doce el Pilar’ de los Jimeno se rodó en 1896. Fue en 1899 y allí nacía “¡una auténtica ciudad de cine!”, como dice Pedro Gutiérrez Recacha.

Aragón en el cine.
Detalle de la portada de 'Aragón en el cine'.
Heraldo/Círculo Rojo.

LA FICHA

‘Aragón de cine’. Pedro Gutiérrez Recacha. Editorial Círculo Rojo. Madrid, 2019. 648 páginas.

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