XIII CONCURSO DE RELATO BREVE DE HERALDO

Tan solo un empujoncito...

Tan solo un empujoncito...
Tan solo un empujoncito...
Heraldo

Caminaba cabizbajo y solitario, pensando cómo dar una vuelta a su vida antes de que ésta acabase con él. Realmente poseía casi todo, dinero, buena posición, amistades, una gran mansión. Pero lo que más echaba de menos era tener una persona para compartir todos sus ideales, que importaba el dinero si no podía gastarlo a gusto.

De niño soñaba con dirigir una granja, muchos animales, caballos y campos, pero se empeñaron en que estudiase una carrera, lo hizo, y no le aportó nada, solo más solvencia acompañada de soledad.

Cuando pensaba en algún pueblo pequeño de su amado pirineo, se le iluminaban los ojos. Estaba decidido a tomar una importante decisión, abandonar la ciudad e instalarse cerca del cielo, donde cada día al mirar por la ventana las montañas le diesen los buenos días.

Si conseguía el valor para hacerlo sabía que el amor y la felicidad vendrían detrás.

Tan sólo un empujoncito.

Mientras caminaba cabizbajo soñaba, si entraba en casa la amargura lo embargaría de nuevo.

Lea todos los relatos que participan en el XIII Concurso de relato breve de Heraldo.

Comentarios
Debes estar registrado para poder visualizar los comentarios Regístrate gratis Iniciar sesión