“El poema se cumple si alguien lo lee y se reconoce”

Jordi Virallonga, ganador del XLVII Premio Internacional de Poesía ‘Hermanos Argensola’ de Barbastro por ‘Incluso la muerte tarda’.

El poeta Jordi Vilaronga, en la biblioteca de Barbastro.
El poeta Jordi Vilaronga, en la biblioteca de Barbastro.
J. L. P.

El catedrático de Literatura Española de la Universidad de Barcelona Jordi Virallonga recibía el viernes el premio de 6.000 euros por haber ganado la XLVII edición del Premio Internacional de Poesía ‘Hermanos Argensola’, que también incluye la publicación del poemario por la editorial Visor. El premio, convocado por el Ayuntamiento de Barbastro, es el decano de los certámenes literarios de Aragón.


-Su colega y paisano Pere Rovira, presidente del jurado del premio de poesía ‘Hermanos Argensola’, alabó su poemario y su figura como "poeta de peso".


-Cuando lo leí, me quedé muy alegre. Ya son diez libros, antologías, ensayo, mucho trabajo. También es por la vejez, uno se va haciendo viejo y es como las escaleras mecánicas, si eres constante pues te van conociendo. ¿Poeta de peso? Será por que peso cien kilos (bromea). Nos conocemos todos los de la generación, igual que a Juan Malpartida (ganador del premio de Novela Corta ‘Ciudad de Barbastro’), pero no soy yo quien tiene que decir que soy un poeta de peso. Pere Rovirá sí que tiene un peso específico en la literatura y en la poesía, escritor, traductor, … Para mí es un elogio inmenso, y se unió la alegría al conocer que era el ganador del premio y también por el jurado que lo daba.


-El ‘Hermanos Argensola’ de poesía es el premio más antiguo de las letras aragonesas y a pesar de que la poesía es un campo minoritario se sigue manteniendo y con una prestigiosa editorial detrás, como Visor. ¿Qué le dice a usted ser el ganador de este premio?


-Me dice mucho. Primero por el premio. Mi poemario lo había presentado a otros concursos pero el jurado de Barbastro supo ver lo que no vieron otros y vieron cosas muy diferentes. Esa profundidad, esa manera de ver una sensibilidad nueva desde la individualidad y cómo la individualidad puede saltar a lo general. El libro tiene una parte muy íntima y otra más “social”, porque la persona que estafa a su hermano es muy probable que estafe a todos los españoles, o a todo el mundo. La maldad y la bondad están en cada uno de nosotros y eso se extiende a toda la civilización. El poemario es un discurso entre uno y otro. Como diversos personajes, con características muy diferentes atienden o les duele lo que está ocurriendo y a veces responden con muy mala leche, y otras con desprecio y alegría, y otras veces no enterándose de lo que ocurre. Es un libro que me costó mucho construir, unos seis años, hasta que logré un equilibro. En un jurado que no diré me dijeron que este libro podría haber estado escrito por un terrorista, o que tenía palabras mal sonantes, o que unos poemas se iban de ironía. Conseguir este tono entre lo irónico, problemático, comprometedor, tiene muchos tonos y que un jurado de tanto nombre y prestigio lo entendiera y le gustará, para mí fue de una emoción absoluta.


-¿El poeta ante la sociedad, de eso habla su poemario?


-No es un poeta es un personaje. Yo lo que hago es crear un personaje que se mueve en un teatro. No tiene que coincidir conmigo ni con nadie, pero es un personaje posible. No es importante decir verdades sino cosas verosímiles, que el lector se las pueda creer. En este sentido construí el poemario, basado en mis experiencias tras leer periódicos, cómics, ver exposiciones, yendo por la calle, tomándome un cortado o una copa, o hablando con mi amigo el kioskero. Para escribir un poemario lo más importante es encontrar el personaje y luego el tono. Y luego la lengua, porque todo la poesía no se escribe ni con buenas ni malas intenciones, si no con palabras.


-¿Por lo tanto estamos ante un poemario accesible para el gran público que huye del barroquismo que a veces se encuentra en la poesía?

-Sí. Hay poesía barroca y simbólica que me gusta más o menos. A mí la que más me gusta es la que yo escribo, pero es un libro que se entiende de arriba abajo y cada uno puede sacar su lectura. El poema se cumple cuando alguien lee algo y se reconoce en él.


-En el fallo del jurado también se dijo que es un poemario que habla sobre el sentimiento trágico de la vida, lo que nos recuerda a Unamuno.

-Todo lo que provenga de Unamuno para nosotros es siempre importante. Es un sentimiento trágico de la vida pero también expresa un sentimiento contemporáneo. No es algo de moda, si no de contemporaneidad. Es un sentimiento trágico pero también irónico, con sentido del humor, buscando la distancia y a veces adentrándose en los temas pero nunca como un mitin, ni como una noticia en la televisión, si no como un personaje que vive las cosas y las siente de una determinada manera.


-Está detrás la editorial Visor, por lo que se espera una buena repercusión.

-Sí. Yo había publicado ya en Hiperion, Lumen, Plaza & Janes, DVD y ahora en Visor es colmar una trayectoria poética. Posiblemente a partir de ahora escribiré de otra manera.