Johnny Depp evita la batalla con 'X-Men' y 'Trascendence' retrasa su estreno
El 20 de junio tendrá lugar el estreno 'X-Men: Días del futuro pasado'.
Johnny Depp no se atreve a luchar en taquilla contra los mutantes. 'Transcendence', el último largometraje de Depp llegará a los cines españoles el 20 de junio en lugar del 6 del mismo mes como estaba inicialmente previsto. El cambio se debe a que el estreno de 'X-Men: Días del futuro pasado', el esperado film de la saga mutante, verá la luz el 6 de junio.
'Transcendence', es un original thriller de ciencia-ficción que explora los conceptos de identidad y moralidad en la era de la Inteligencia Artificial.
Protagonizada por el nominado al Óscar Johnny Depp (Sweeney Todd Piratas del Caribe), Paul Bettany (El Código Da Vinci) Rebecca Hall (El truco final: El prestigio), Kate Mara (Shooter: El tirador), Cillian Murphy (Origen, El Caballero Oscuro: La leyenda renace), Clifton Collins, Jr. (Star Trek, Pacific Rim) y el ganador del Óscar Morgan Freeman (Million Dollar Baby, El Caballero Oscuro), Transcendence supone el debut en la dirección del director de fotografía ganador del Óscar Wally Pfister ('Origen', la trilogía de 'El Caballero Oscuro').
El Dr. Will Caster (Johnny Depp) es el investigador más importante en el campo de la Inteligencia Artificial, trabajando en la creación de una máquina sensitiva que combine la inteligencia colectiva de todo lo conocido con el rango completo de emociones humanas.
Sus experimentos altamente controvertidos le han hecho famoso, pero al mismo tiempo le han convertido en el principal objetivo de extremistas anti-tecnológicos que, en su intento de destruir a Will, se convertirán inadvertidamente en los catalizadores de su éxito haciéndole partícipe de su propia trascendencia. Para su mujer Evelyn (Rebecca Hall) y su mejor amigo Max Waters (Paul Bettany), ambos compañeros de investigación, la cuestión no es si pueden hacerlo sino si deben hacerlo.
Los peores miedos de Evelyn y Max se hacen realidad cuando la sed de conocimiento de Will evoluciona en una omnipresente búsqueda de poder de consecuencias desconocidas. Lo único que se vuelve terroríficamente incuestionable es que puede no haber modo de detenerle.
