Arte

Insectos, pájaros y peces invaden un museo de papel en Zaragoza

El nuevo museo zaragozano muestra desde este jueves el arte de la papiroflexia con más de 200 obras de los artistas más conocidos del mundo.

Museo del Origami
Museo del Origami_3

Un pequeño zoológico se ubica en la Escuela-Museo de Origami de Zaragoza, que ha abierto sus puertas al público general este jueves. Una cuarentena de personas ha desafiado la lluvia y el frío para conocer mejor el mundo del plegado de papel.


El museo recorre la historia de este arte, tanto en Japón como en Europa. Figuras con nombre propio, como las creadas por Miguel de Unamuno o el maestro japonés Akira Yoshizawa muestran las diferentes tendencias existentes y su evolución desde las figuras más sencillas hasta las creadas con más de 500 pliegues.


Un alumno aventajado es Pablo Carnicer, que con solo 11 años ya es capaz de realizar dragones con una hoja de papel. "Me encanta. Empecé el Dia del Libro del año pasado, cuando me compré un libro de papiroflexia y empecé a doblar", explica mientras observa con atención las figuras.


Los animales son las estrellas del museo. Pájaros, insectos, peces, incluso dinosaurios invaden las salas. El ser humano tiene un pequeño rincón dedicado, con máscaras y figuras de gran realismo.


Unos vikingos del maestro de la papiroflexia Éric Joisel eran los que atraían la atención de Ana María Larqué. "Vengo porque me lo han recomendado. Es la primera vez que vengo y me está gustando un montón", aseguraba. Junto a ella se encontraba su amiga Marta García, que se veía incapaz de emular a los artistas. "Hay que tener mucha paciencia". Ella repetía, tras la exposición que se realizó en este mismo lugar hace cuatro años. 


Fue esta muestra, a la que acudieron 43.000 personas, la que hizo surgir la idea de crear un museo. En este tiempo se barajaron diferentes ubicaciones, hasta que se decidió que el Centro de Historias era el lugar ideal. Su director, Jorge Pardo, reconoce que están ?muy contentos? con la elección, ya que tras las muestras de 2009 y 2013 en este mismo lugar ?el origami se relaciona con el Centro de Historias?.


El museo zaragozano es el primero del mundo dedicado al arte del origami. ?En Japón hay otro, pero es un origami elemental, no como arte?. asegura su director, Jorge Pardo. El museo consta de dos partes, una con exposiciones temporales y otra con una exposición permanente. ?Habrá una sucesión de exposiciones cada dos o tres meses, por lo que habrá cosas totalmente distintas?, explica.


Un museo autofinanciado

La entrada al museo es de tres euros (1,50 la tarifa reducida). ?Es un precio muy barato, que esperamos que junto a la tienda y los talleres permita que el museo se autofinancie?, explica su director. ?Somos una organización sin ánimo de lucro, no queremos ganar dinero con esto?.


Los días entre semana se realizarán visitas guiadas para escolares, mientras que los fines de semana se organizarán talleres. Los próximos servirán para aprender a hacer adornos navideños solo con papel.


Además de las entradas, otra forma de colaborar es a través de las figuras del socio, el amigo y el simpatizante del museo. Las aportaciones, entre los cinco y los 300 euros, dan derecho a aparecer en su web, tener entrada libre o conseguir descuentos en la tienda, según el caso.


Entre los simpatizantes llama la atención el gran número de nombres japoneses que se pueden encontrar. Se dieron de alta durante la feria de origami de Tokio, a la que acudió Jorge Pardo, como una forma ?de apoyo al museo, algo simbólico?, explica.


Por el momento, el museo da trabajo a dos personas a tiempo parcial, aunque el número de trabajadores en un futuro dependerá de la afluencia de público, según explica su director. También colaboran miembros del Grupo Zaragozano de Papiroflexia, el más antiguo del mundo ya que está en funcionamiento desde 1944.